La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) publica su primer informe completamente dedicado a la situación de Cuba en 37 años, criticando que en el país comunista no existan los elementos fundamentales ni las instituciones propias de una democracia representativa, además de examinar el panorama de la Isla entre 2017 y 2019, informa Martí Noticias.
El documento detalla en Cuba «no hay independencia judicial, se restringen los derechos políticos y la libertad de expresión, y se violan los derechos enunciados en la Declaración Americana sobre Derechos y Deberes del Hombre».
Asimismo el CIDH expone que existe de igual modo «un régimen de partido único restringe la participación de las personas con convicciones políticas diferentes para participar en los asuntos públicos y aspirar a cargos representativos».
Saca a la luz el riesgo que enfrentan activistas y defensores de derechos humanos, «quienes son víctimas de detenciones arbitrarias, procesos de criminalización y persecución judicial, así como de constantes restricciones de viajes internacionales y represalias cuando regresan» a Cuba.
El órgano de la Organización de los Estados Americanos (OEA) lamenta el Gobierno cubano no le permita «realizar una visita de observación», y añade su preocupación por los graves problemas en la nación caribeña con la libertad de opinión, expresión y difusión.
Stuardo Ralón, relator para Cuba de la CIDH, dijo al presentar el informe virtual, que el mismo vuelve a mencionar que la Isla «sigue siendo el único país del hemisferio en el cual no existe ningún tipo de garantía para el ejercicio del derecho a la libertad de expresión».
Según el relator, «se mantienen en el país un modelo de monopolio estatal sobre los medios de comunicación y la prohibición de fundar medios privados, todo lo cual es incompatible con los estándares internacionales sobre libertad de expresión».
El CIDH también analizó la reforma constitucional en Cuba, y por último ratificó que el embargo estadounidense hacia el régimen de la Isla, no exime al Gobierno de cumplir con sus obligaciones internacionales, aunque agregó Washington debería poner fin al mismo.
Sobre la Constitución cubana, el organismo precisó no debe estar por encima de los tratados internacionales.