El domingo, autoridades mexicanas detuvieron a migrantes en Cárdenas, un municipio del estado de Tabasco, entre los detenidos 14 eran cubanos, otros eran salvadoreños, guatemaltecos y hondureños, todos viajaban hacinados en un camión cargado de plátanos.
Entre los migrantes detenidos tres eran menores de edad.
Según comunicado de la Guardia Nacional (GN), estaban realizando un patrullaje preventivo en el citado municipio cuando “ubicaron un tractocamión que circulaba en el carril de baja velocidad y de manera intempestiva cambió de carril, infringiendo con ello el Reglamento de Tránsito”.
Tras la infracción, personal de la GN, mandó a detener el vehículo para “aplicar la infracción correspondiente y efectuar una revisión de seguridad”, de esa manera descubrieron que llevaban escondidos a los migrantes entre los que encontraron que iban tres menores de edad, todos en condiciones de hacinamiento, “inmediatamente se proporcionó agua y asistencia médica”.
Cuando se comprobó que viajaban sin documentación legal en territorio mexicano, fueron puestos a disposición del Instituto Nacional de Migración (INM), probablemente para proceder a la repatriación.
Tanto el chofer como el acompañante fueron puestos a disposición de la delegación de la Fiscalía General de la República (FGR) para su investigación.
Los migrantes se arriesgan a realizar travesías de fronteras con el fin de llegar a suelo estadounidense sin saber que pueden correr el riesgo de extorsión, secuestros y robos poniendo sus vidas y las de sus familiares en riesgo.
En los diez primeros meses del presente año fiscal 177,848 migrantes cubanos entraron a Estados Unidos por la frontera con México.
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