Un balsero cubano recien llegado a Miami dió un espeluznante testimonio de lo que vivió en el mar tratando de alcanzar la libertad.
El joven salió junto otros nueve cubanos pero un problema en el motor convirtió la travesía en una tragedia.
“Fue una situación muy dura, vi gente morir frente de mí, con pánico, deshidratados” dijo Julio Ibarra a América Tevé.
Ibarra perdió en la travesía su mejor amigo.
“Yo vi al catamarán, pedí ayuda y el capitán se dio la espalda, yo le dije a mi amigo que flotara mientras buscaba ayuda, pero cuando volví no estaba” dijo.
Las autoridades de Estados Unidos han retirado advertencias de lo peligroso de la travesía y de las pocas posibilidades de éxito en quedarse en el país.