Asesinado en la noche del viernes, un joven cubano de apenas 18 años de edad en el poblado de Bejucal, en las afueras de La Habana, según reporte de redes sociales.
El muchacho identificado como Brayan Califa, se desempeñaba como entrenador de Tenis de Mesa, y el pasado viernes 13 de octubre en la noche, salió de su vivienda junto a amigos para pasar el rato en una piscina cercana, cuando un hombre ebrio tropezó con él y lo ofendió, reveló en conversación con CiberCuba, Jenniffer Vigil Aldama, prima de la víctima.
Según declaraciones de Vigil Aldama, Califa «iba para una piscina con los amigos y se topó a ese hombre que estaba borracho».
«Ellos nunca tuvieron problemas ni nada. Él dice a mi primo ¿qué tu miras? y se empezó a meter con el y mi tía le dijo no te metas con mi chamaco», contó.
Luego del altercado, la madre del joven le pidió fuera por una calle menos oscura para evitar otros percances.
«Mi tía le dice a Brayan no te vayas por la oscuridad. Él se fue por la oscuridad con los amigos y ahí salió ese hombre y le dio una puñalada», lamentó la joven.
La prima del fallecido confesó que la puñalada le atravesó de manera instantánea el cartílago que conecta al corazón, hígado y pulmón, y aunque fue rápidamente trasladado al policlínico local, murió poco después de que llegara al centro sanitario.
El hombre ebrio apareció en el policlínico, y la policía procedió al arresto, indicó Jennifer Vigil, quien dedicó un triste mensaje a su primo tras el deceso.
«Todavía no me lo creo, mi hermano, mi mitad, mi tanke, mi sangre. Dios mío, solo 18 añitos, toda una vida por delante, el dolor es inmensamente brutal. Me harás falta toda la vida, y pensar que antier estábamos jodiendo como siempre. Recuerdo todo lo que vivimos de niños, y cuántas lagrimas soltamos juntos, lo compartíamos todo: alegría, tristeza, llantos, risas, la vida no me dio hermanos, pero tú eras mas que mi hermano, éramos uno. Mi vida entera derrumbada en una noche, en una llamada. Te amo y te amaré por siempre mi chiquito, la luz de mis ojos. Que afortunado es el cielo de tenerte. Te amo más que a mi vida, esto será eterno, que en paz descanses mi rey.Nunca dejaré de amarte», escribió la joven consternada.
Trágicos eventos como este están sacudiendo la Isla casi a diario, donde los reportes de violencia se han multiplicado de manera significativa durante el último año, en un país donde las autoridades desafortunadamente no trabajan para proteger a los ciudadanos, sino para reprimir a quienes piensan de manera diferente, y a quienes se atreven a expresarlo.
Aunque el auge de la violencia en el país afecta a todos los ciudadanos por igual, cabe resaltar que son los jovenes en su mayoría, las principales víctimas de la ola de crímenes que están teniendo lugar en la Isla, así lo evidencia la reciente muerte de otro joven a fines de septiembre, Yasiel Bicet, quien recibió una puñalada en el municipio Marianao, y estuvo varios días en estado crítico hasta que falleciera.
Asimismo, el caso de Marcos Alejandro Gámez Machado, un joven de 20 años, asesinado en Baracoa, provincia de Guantánamo, el pasado mes de septiembre.