El pasado lunes el humorista cubano Otto Ortiz, haciendo uso de la simpatía y la espontaneidad que lo caracterizan, criticó de manera jocosa el abusivo precio que posee actualmente un cartón de huevos en la isla, el cual alcanza los 3,500 pesos cubanos.
El comediante compartió un video en su perfil de Facebook, donde aseguró que la creciente inflación que persiste en la economía cubana, cuyo principal efecto es la abrupta disminución del poder adquisitivo de los residentes debido a la devaluación de la moneda nacional, también provocará cambios en el argot popular cubano.
En el audiovisual, Ortiz cita como ejemplo la frase: «Me costó un huevo», mientras mostraba uno, sujetándolo con la mano derecha y agregando: «Créeme, que cambió».
Con el rostro sonriente y realizando una comparación graciosa, pero bastante reveladora de la alarmante situación que existe en relación a este excelente alimento, expresó: «Este huevo hoy en día vale mucho más que el mío».
Asimismo, el video expone el significativo aumento que ha experimentado el costo de este producto, comercializándose primero en 0,09 centavos por unidad, luego en 5,00 pesos, posteriormente en 50,00 pesos, hasta arribar al precio actual de 116,66 pesos teniendo en cuenta que el cartón de 30 unidades equivale a 3,500 pesos.
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Lo cierto es que las denuncias de los antillanos por el elevado costo del huevo cada vez son más frecuentes, máxime cuando dicho alimento ha constituido durante años el respaldo nutricional de la mayoría de ellos, dada la imposibilidad de comprar productos cárnicos vitales para mantener una alimentación adecuada.
No obstante, el huevo se ha encarecido tanto que, en la actualidad, su adquisición es igual de difícil que la de la carne de cerdo o la del pollo.
De hecho, una cubana que vive en Sevilla, España, dio a conocer a través de un video publicado en TikTok en marzo del presente año, su enorme sorpresa por los precios imperantes en la isla, entre estos el del huevo.
Al respecto mostró los productos que había comprado y reveló sus precios: pan de molde a 300 CUP, un cartón de huevos a 2,700 CUP, menos de una libra de cebolla a 300 CUP, dos paquetes de espaguetis a 350 CUP cada uno y un pomo de aceite a 1,000 CUP.
Igualmente, el abogado Manuel Viera recurrió a sus redes sociales para denunciar el costo en extremo alto de un cartón de huevos en La Habana, señalando que el mismo había alcanzado los 3,500 pesos cubanos en determinadas zonas de la capital, una cifra superior al salario mínimo establecido, que es de 2,100 pesos cubanos y que representa 8,92 dólares y 8,68 euros.
Otro cubano, nombrado Luis Sosa Aragón, también se quejó de los precios de los alimentos, recalcando: «Estos precios son inaccesibles…No hay nada para la población; sin embargo, las MIPYMES tienen de todo. Las MIPYMES es, ¿quién?, el Estado, quien nos reprime».
Sin dudas, las medidas económicas implantadas por el régimen cubano solo han contribuido a que el pueblo esté aún más sumido en la pobreza y lo peor es que no hay perspectivas de que este complejo escenario pueda mejorar.
