Recientemente ha trascendido un nuevo elemento de gran relevancia sobre el naufragio acaecido en noviembre de 2022 como resultado del cual perdieron la vida alrededor de 16 balseros cubanos. Y es que la Fiscalía de Estados Unidos ha determinado la participación en este hecho de Yaqueline Domínguez Nieves, de 25 años, a quien se le han impuesto 10 cargos federales por tráfico ilegal de personas.
Arturo Verdecía, padre de uno de los balseros, nombrado igual que él, ofreció declaraciones al equipo de Telemundo 51, alegando: «Hoy recibí la llamada del investigador que atiende el caso y me dijeron que sí, que fue arrestada la primera persona involucrada y que fui engañado por ella».
Según lo expuesto por dicho señor, el viaje fue organizado por una persona radicada en la isla y la acusada, residente en Florida, se encargaba de recibir una parte del monto de dinero exigido. Al respecto señaló: «Ella me decía… sí, hoy sale la lancha, como salió ese día a la 1 de la mañana. Y eso es seguro, él viene con mi primo, porque son amigos. Vaya… como que no era un viaje de negocio… ella pidió los 6 mil dólares para contribuir con el combustible».
La embarcación, denominada «El Alba», zarpó desde Playa Jaimanitas con casi una decena de migrantes a bordo, sin embargo, a Verdecía le habían informado que solo viajarían 6. En tal sentido comentó: «Salieron 19 personas… incluidos menores de edad. Y ahí empezó la tragedia… empecé a buscarlo por todos los canales… y el día 19 me llamaron los investigadores para decirme que a mi hijo lo habían encontrado, pero sin vida».
Angustiado por la extensa espera, trató de establecer contacto con Domínguez, pero fue en vano. «No quiso contestarme más. Yo vi que no llegaba y me pongo a llamarla para ver qué sabía de su supuesto primo, y llegó el momento en que no quiso contestarme más», manifestó Verdecía.
De la mentada cifra solo lograron sobrevivir dos personas, una de ellas identificada como Alexander Piloto, quien fue auxiliado por los miembros de otra embarcación que también se hallaba a la deriva y que presentaba varias bajas humanas. Finalmente, este hombre fue rescatado y repatriado a la mayor de las Antillas. Durante su conversación con el citado medio de noticias, Verdecía añadió: «Mi hijo tenía un chaleco, pero se puso a ayudar a los niños que venían dentro de la lancha».
La mujer vinculada a la tragedia vive en Sebring, Florida, y actualmente permanece detenida esperando la realización del correspondiente juicio penal. En virtud de un comunicado emitido por la fiscalía, Domínguez podría ser condenada a cadena perpetua o a pena de muerte.
Arturo Verdecía concluyó sus declaraciones recordando la triste e irrevocable consecuencia de esa travesía marítima: «Ya mi hijo va a cumplir ahora en noviembre, el día 16, dos años de muerto, y yo le digo a todo el mundo que ese es el dolor más fuerte que puede tener un padre y una madre».
