El gobernador del estado de la Florida, Ron DeSantis el pasado viernes vetó varios proyectos de ley entre ellos el de conducir por el carril izquierdo en las carreteras del estado, así como el privilegio del examen de posgrado para miembros del servicio.
El proyecto H.B. 317 tenía como propósito prohibir a los conductores de Florida transitar por el carril izquierdo en las autopistas con al menos dos carriles y límites de velocidad de 65 mph o más a menos que estuvieran rebasando a otros vehículos, girando a la izquierda, preparándose para salir o por seguimiento de indicaciones de control de tráfico.
Los infractores que infringieran la ley de ponerse en vigor tendrían que pagar una multa de 158 dólares y al decir de los simpatizantes de la Cámara de Representantes y el Senado del estado del sol podría haber disminuido significativamente la seguridad vial y pudo evitar las interrupciones y frustraciones en el tráfico estatal, tal y como existe en otros estados de la nación.
No obstante, DeSantis consideró que la aprobación de la ley conllevaría a sancionar a muchos conductores que no obstaculizan el tráfico, así como a generar interrupciones en algunas áreas urbanas al desalentar el uso de este carril. Con esta decisión se refleja la complejidad y diversas opiniones en relación a las regulaciones del tráfico en la Florida, un estado conocido tanto por sus áreas naturales como por sus congestionadas carreteras.
«El proyecto de ley podría aumentar la congestión en las áreas urbanas de Florida, ya que los conductores pueden decidir no utilizar el carril más a la izquierda por temor a ser multados», dijo el gobernador en su carta de veto.
Otros de los proyectos de ley que Ron rechazó fue el SB.494 el cual impediría que las universidades descartaran algunos requerimientos en los exámenes para miembros del servicio que solicitaran un posgrado y acentuó que las pruebas de los centros de altos estudios eran necesarias con todos sus niveles de rigurosidad.
«Las pruebas estandarizadas son un componente necesario de un proceso riguroso y basado en el mérito proceso de admisión. Si bien la motivación detrás de esta legislación es loable, no lo es
claro que la renuncia a estas pruebas será beneficiosa para nuestras instituciones o incluso, en muchos casos, a los propios estudiantes», hizo referencia en su carta, Ron.
El tercer veto recayó en el HB. 821 el cual establecía una revisión de las tarifas más altas por la gestión de aguas pluviales en el Distrito de Control de Aguas de Melbourne-Tillman en el condado de Brevard. A su juicio de aprobarse la norma jurídica resultaría en un incremento de tarifas para los usuarios que afectaría a los consumidores.
«Como Florida ofrece muchos programas de subvenciones (establecidos por mi Administración) que apoyan el mantenimiento y construcción de la infraestructura de gestión del agua de la Florida, el estado no debe facilitar la imposición de tasas más elevadas a tal efecto», aclaró el gobernador de Florida.