Mansión en Miami resalta por su espectacular belleza y su precio de 135 millones de dólares

Foto: Realtor.com / Miami MLS 2024

Son pocos las zonas en Estados Unidos cuentan con un ambiente espectacularmente atractivo como es el caso del sur de Florida donde todos los barrios tienen particularidades que los hacen singulares. Tal es el caso de Coconut Grove que se encuentra cerca de Coral Gables al sur de Miami y que se distingue con una exuberante vegetación que se fusiona con la Bahía de Biscayne.

En el pasado el barrio miamense dio la bienvenida a importantes músicos, artistas y escritores que se asentaron en viejos caserones y grandes mansiones rodeadas de viejos árboles centenarios y palmeras al estilo veraniego de la ciudad. No es un secreto que esta localidad sumamente tranquila es habitada en su mayoría por importantes millonarios y celebridades por lo que las ventas de casas no suelen comprarse en pocos dígitos. Recientemente una mansión en este barrio salió al mercado por un valor de 135 millones de dólares.


La finca Banyan Ridge Estate debe su nombre a un árbol de más de cien años que tiene sus extensas raíces alrededor de toda el área de la piscina. Distingue por su denso follaje de plantaciones que incluyen orquídeas y otras plantas que interactúan con la presencia de elegantes pavos reales que merodean el lugar.

La extensa longitud del área que abarca unos 4.5 acres y que comprende 10 parcelas de tierra más bien parece un centro turístico que una mansión privada. Posee un muelle de 12 mil pies cuadrados frente a la bahía vizcaína con un elevador de barcos y según los agentes inmobiliarios Lourdes Alatriste y Holly Parker de Douglas Elliman cuenta con un acantilado de 17 pies de elevación de la casa hasta el borde del agua.

Además, cuenta con dos residencias principales cargadas de lujosos muebles y gran confort, una para la familia y otra para los huéspedes. Entre las dos poseen trece dormitorios y quince baños, varias piscinas, gimnasio, spa, todo rodeado en un entorno natural y una casa de orquídeas.

La primera residencia está constituida por cuatro dormitorios espaciosos, cuatro baños, así como una espectacular área de cocina abastecida de los mejores utensilios y equipos para la cocción de alimentos. Tiene varias salas de estar por todo el inmueble, así como bares de vino y una piscina tipo laguna que puede visualizarse desde la suite privada que contempla un patio con ducha al aire libre para relajarse ante la natural vista de la finca.

Con respecto a la segunda residencia totalmente cubierta de ventanales de vidrio se conoce que cuenta con cuatro dormitorios y tres baños y otra piscina que permite despejar la vista con la hermosa bahía de Biscayne y los rascacielos del centro de Miami. El lugar tiene varios espacios para el uso de los empleados como cocina, sala de conferencia y vestuarios.


La otra casa es de huéspedes y también tiene vistas a la cascada desde sus tres dormitorios. Cuenta con un comedor con capacidad para veinte personas, así como otros espacios llenos de hermosa arquitectura, pisos de mosaico, techos de yeso y muchos acabados artesanales por todo el inmueble.

En la década de los ochenta el restaurador Jonathan D. Lewis comenzó a construir esta propiedad frente al mar y para ello reunió 10 parcelas en varias negociaciones con vendedores de la zona a los cuales compró terrenos para construir este hermoso lugar. Jonathan natural de Ohio y quien falleció el pasado año era hijo de Peter B. Lewis, exdirector ejecutivo de Progressive Insurance Company.

Lewis inauguró varios restaurantes en la ciudad del sol, pero posteriormente se dedicó a las causas políticas en las cuales abogó por la inclusión de LGBTQ, así como el empoderamiento de los jóvenes en la sociedad.

La finca nunca antes ofrecida al público como se puede imaginar está totalmente rodeada de mucha flora y mucha sombra que permite a quien la disfrute meditar con tranquilidad y regocijarse de un paradisiaco entorno.

De acuerdo con Altriste el mercado inmobiliario de este barrio de Miami en los últimos tiempos junto con el más amplio de Miami. En el 2022 el multimillonario inversor de cobertura Ken Griffin pagó 106.875 millones de dólares para comprar una propiedad en ese barrio lo que demuestra lo planteado sobre el interés por la zona.


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