Hace varias semanas atrás el primer ministro cubano Manuel Marrero Cruz anunció la posible cancelación de la exención de impuestos a personas que importan alimentos, medicamentos y aseo a Cuba. La medida estaría sujeta según su criterio a los excesivos precios que después tienen esos productos en el mercado privado y que perjudican los bolsillos de las familias cubanas.
La anacrónica decisión que sí afectaría mucho al pueblo de a pie de ponerse en práctica la dio a conocer el jefe de gobierno en el concluido tercer período de sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular que se efectuó en el mes de abril en el Palacio de las Convenciones de La Habana. No obstante, varios expertos aseguraron a Martí noticias que esto podría traer consigo que muchas familias dejen de percibir alimentos de calidad e insumos básicos que no tiene el estado debido a la crisis económica que atraviesa el país.
“Nosotros hemos analizado con profundidad que hay muchas distorsiones detrás de esta medida que la aprobamos para beneficiar al pueblo. Esto ha sido tomado por personas que se dedican a traer inmensas cantidades de productos para comercializarlos en un mercado negro a unos precios excesivos y abusivos”, dijo Marrero en su discurso frente al parlamento cubano.
El economista cubano Emilio Morales quien se dedica a analizar el conglomerado empresarial militar de Cuba mediante el Think Tank Cuba Siglo 21 plantea que desde que el régimen autorizó la importación a la isla de alimentos, aseo y medicamentos sin aranceles como medida para aliviar las protestas que se desencadenaron el 11 de julio el pueblo cubano tuvo una vía para poder recibir estos productos ante la imposibilidad de la dictadura de abastecer sus entidades estatales.
«Esta medida se implementó para aliviar las carencias de la población y evitar el descontento popular. Ahora, el régimen quiere cobrar un arancel a las mercancías que entren al país, buscando exprimir aún más el bolsillo de la diáspora cubana», argumentó Ernesto al periodista cubano Mario J. Pentón.
De darle marcha atrás a estas importaciones gratuitas no solo elevaría el precio de esos productos en el marcado privado en Cuba, sino que cerraría el cerco para aquellas familias que dependen de los envíos que realizan sus parientes desde el exterior, explicó Morales quien precisó, además: «Esto va a generar más hambre, más miseria, la población ya está abrumada con la inflación y las políticas económicas desastrosas del gobierno».
A su vez contribuiría a que cada día más cubanos quieran irse de la isla en busca de mejores oportunidades laborales, económicas y lejos de la verborrea comunista de hace más de 60 años. Aumentando así la oleada migratoria que ha provocado que más de medio millón de personas en los últimos años se lancen en peligrosas travesías ya sea por mar o por tierra hacia Estados Unidos. En tal sentido podría agravarse aún más la situación del envío de remesas a Cuba que ya ha descendido un 50% desde 2021.
El sitio de noticias Diario de Cuba contempla una nota de la economista Rafaela Cruz en el que denuncia al régimen y la cúpula de secuestrar la economía nacional y explica cuanto se esfuerzan en aplastar al pueblo. “No es sorpresa entonces que declaren la economía de guerra, aunque no guerra contra el hambre, las enfermedades o la peste, sino contra el propio pueblo que, a veces, solo a veces, se atreve a intentar aliviar el cepo socialista. El pueblo es el verdadero enemigo”, resaltó la financiera.
Sin embargo, para nadie es secreto que detrás de esta medida que anunció Manuel Marrero de enfrentarse al «injusto mercado negro» se enarbola la bandera de enriquecer los bolsillos de los dirigentes mientras toman el control nuevamente de algunas alternativas para el ingreso de mercancías al país según explicó Rafaela.
Al respecto Emilio aseveró que la dictadura castrista busca la forma de apoderarse de las divisas que entran por diferentes vías privadas y no ingresan a las arcas del estado. Y asegura que los principales «motores impulsores de la economía cubana»: el turismo y la exportación de los servicios de salud se han visto afectados en los últimos años tras la pandemia de covid-19.
«Ahora, están tratando de arañar dólares a la costa del exilio cubano. El objetivo es eliminar la competencia de las importaciones gratuitas y recuperar el monopolio del abastecimiento minorista», ratificó el economista que tiene miles de seguidores en sus plataformas digitales.
Las declaraciones del primer ministro se produjeron en una etapa delicada para el gobierno de Díaz-Canel que lleva varios años ahogando al país como mismo hicieron sus antecesores mientras el pueblo sufre las pésimas decisiones que una vez condujeron a masivas protestas por todo el territorio nacional y conllevaron al encarcelamiento arbitrario de cientos de jóvenes que exigían libertad.
«Estamos viviendo un proceso similar al de Venezuela. La caída de Maduro podría significar la quietud del sistema cubano», concluyó el experto haciendo referencia a la situación política existente en Venezuela después que el dictador Nicolás Maduro cometiera fraude en las elecciones presidenciales de este mes de julio.
