Mercado inmobiliario en Estados Unidos comienza a experimentar una disminución de los precios de las viviendas

En correspondencia con el último estudio mensual publicado por Realtor.com, el pasado mes de julio se evidenció un descenso en el precio medio de los inmuebles en Estados Unidos, el cual se ubicó en 439,950 dólares, siendo inferior en 5,050 dólares al registrado en junio, que alcanzó los 439,950 dólares.

Dicha disminución beneficia ineludiblemente a quienes pretenden adquirir una vivienda, aunque las elevadas tasas de interés continúan siendo un factor limitante para la concreción de actos de compraventa, por lo que muchas personas están esperando que las mismas bajen antes de optar por convertirse en propietarios.

Según lo expuesto en el mentado informe la proporción de listados con reducciones de precios se incrementó en un 3,4% en relación al año anterior, lo que indica que el mercado inmobiliario está experimentando ciertos cambios favorables para los compradores potenciales.

En medio de este panorama de depreciación en la nación norteña, el mercado del sur de Florida sigue presentando altos niveles de demanda, lo que contribuye a que los valores de las viviendas permanezcan elevados. Sin embargo, especialistas en bienes raíces advierten que las adecuaciones en los precios incluyen a esta área de especial connotación.

Históricamente en julio el número de ventas de viviendas en el país aumenta, pero este año ha sido la excepción, en gran medida, porque las tasas de interés reflejan valores poco atractivos. En el caso de Florida, a ello se suman las elevadas tarifas de los seguros, los gastos por concepto de mantenimiento y otros de carácter adicional asociados a los condominios, situación que ha obligado a numerosos propietarios a poner en venta sus apartamentos, ante la imposibilidad de asumir tales pagos. Además, la aplicación de la ley de reservas que prevé la existencia de fondos suficientes para cubrir los gastos de futuras reparaciones en todas las asociaciones de condominios ha coadyuvado al fortalecimiento de dicha tendencia.

Lo cierto es que el contraste que existe en el sur de Florida en cuanto a los ingresos percibidos y el costo de vida imperante impide que muchos de sus residentes puedan aspirar a la adquisición de la propiedad de un inmueble. Precisamente la recesión en las ventas de viviendas ha propiciado que los vendedores rebajen los precios de sus residencias y concedan ayudas vinculadas a los gastos de cierres.

Las regiones que han mostrado las mayores reducciones en los precios de inmuebles son Tampa, en Florida, Charlotte, en Carolina del Norte y Phoenix, en Arizona, con un descenso del 9,4%. En estas zonas, los vendedores han decidido atemperar sus ofertas a las condiciones actuales del mercado luego del vertiginoso crecimiento de los precios suscitado en el marco de la pandemia de Covid-19.