El gobierno de Estados Unidos flexibilizo hace una semana las relaciones económicas con Cuba permitiendo las inversiones directas de instituciones bancarias pero el anuncio ha sido recibido con desconfianza en los bancos estadounidenses.
Global Trade Review (GTR), aseguro que los bancos estadounidenses estudian con mucho cuidado las nuevas medidas de Obama para conocer todas las implicaciones legales de cualquier operación con la isla.
«Lo mismo sucede con las grandes corporaciones, agencias aseguradoras y otras firmas estadounidenses que miran hacia esos nuevos mercados», dijo a GTR Gary Mendell, presidente de la compañía estadounidense Meridian Finance Group.
«La prensa en torno a los cambios anunciados por el presidente Obama ha sido mucho más dramática que los cambios mismos» dicen los expertos que explican que la vigencia del embargo impide cualquier inversión seria en la isla.
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