El popular actor cubano César Évora este 4 de noviembre está celebrando su cumpleaños número 65 lejos de su tierra natal, pero con la seguridad de que todo un pueblo lo admira por sus espectaculares interpretaciones de personajes de telenovelas que han pasado a la historia. Comenzó su trayectoria artística después de presentarse a un casting de una película donde le asignaron un papel y a partir de ahí su vida cambiaría completamente sin saber que años después sería uno de los galanes de la televisión cubana y mexicana.
Uno de sus principales papeles en la televisión cubana que aún recuerda el público es el de la serie policíaca «Dia y Noche. Su propia Guerra» donde compartió con los excelentes actores Albertico Pujol, Enrique Molina, Jorge Villazón y Coralita Veloz quien hoy cumple años también. Durante la década de los ochenta había participado en varias producciones cinematográficas como «Una novia para David», «Cecilia» y «Capablanca» que también son reconocidas en la cultura cubana.
En 1993 en pleno Período Especial el galán fue invitado para formar parte del proyecto Corazón Salvaje en México, pero no pudo emigrar en ese momento por problemas que presentó con los papeles del contrato. Tiempo después logró salir del país con apenas 40 dólares en el bolsillo y un pequeño maletín. Muchos consideran que en la nación azteca el actor acaparó más la atención y alcanzó la atención de importantes personalidades de las telenovelas que le llevaron a consolidar su carrera profesional.
Uno de ellos fue Emilio Azcárraga propietario de Televisa quien le ofreció un contrato exclusivo con su empresa. A partir de ese momento Évora se ha hecho dueño de parte de ese público mexicano con los protagónicos de novelas como Abrázame muy fuerte, La Madrastra, El Manantial, Cañaveral de Pasiones en las que intercambió con excelentes artistas como Victoria Ruffo, Fernando Colunga, Adela Noriega o Daniela Romo.
Desde joven el actor antillano recibió innumerables propuestas para desempeñarse en la radio y la música debido a uno de sus más importantes dones, su gruesa voz que heredó de su padre. Sin embargo, nunca renunció a su pasión por la pantalla chica donde evidentemente ha alcanzado el estrellato. En los últimos tiempos se le ha visto en las novelas «S.O.S. me estoy enamorando», «¿Qué le pasa a mi familia?» y la serie «El último Rey».
El actor que lleva más de tres décadas residiendo en la nación centroamericana se nacionalizó en ese país en el año 1999 y consolidó su carrera en las novelas ganando mucha atención de ese público y de otros en países del área incluyendo Cuba y Estados Unidos. Sobre su profesión se conoce que siente una eterna pasión que le ha llevado a donde está hoy en día y la califica como una carrera muy sacrificada y poco sencilla.
«Es un trabajo al que le dedicas las 24 horas del día. En mi caso, si estoy soñando o durmiendo, estoy pensando en cómo voy a solucionar una escena, a lo mejor me viene una solución. Así vivo constantemente, hago otra cosa para distraerme, leer, ver una película, y me puedes ver pensando en cómo voy a solucionar una escena», dijo César.
En una entrevista explicó cómo fue su niñez cuando vivía en Cuba y agradeció la formación que tuvo gracias a los profesores de aquella época. “Yo crezco como cualquier niño puede crecer en Cuba, en las circunstancias de la realidad cubana. Había limitaciones y creo que era para todos y vivíamos con lo que teníamos”, comentó y añadió que en ese tiempo el claustro de profesores trabajaba por «vocación»