En un reciente análisis, se abordó la importancia de la petición familiar como una alternativa viable para los cubanos que se encuentran en un limbo migratorio en Estados Unidos, especialmente aquellos bajo la categoría I-220A. La abogada Claudia Cañizares enfatiza que si existe la posibilidad de realizar una petición familiar, es crucial iniciar el proceso lo antes posible.
Para aquellos que han acumulado presencia física ilegal o han ingresado al país de manera irregular, se presenta la necesidad de solicitar un perdón, específicamente el I-601. Este perdón requiere que la persona salga del país para llevar a cabo la entrevista consular, lo cual genera inquietud entre muchos solicitantes.
Funcionamiento del PERDÓN I-601
La abogada Cañizares explica que, si un solicitante tiene un hijo o hija que es ciudadano estadounidense o un cónyuge residente permanente, puede presentar una petición familiar y solicitar el perdón a través de su cónyuge. Sin embargo, es vital entender que el perdón no garantiza protección absoluta contra la detención. Aunque en la mayoría de los casos tener el perdón presentado puede ayudar a evitar problemas, no es una carta de inmunidad.
La abogada alienta a los solicitantes a no dudar en aplicar para el perdón, ya que muchas personas que siguen este proceso logran salir del país, realizar la entrevista y regresar con su residencia permanente sin complicaciones. Sin embargo, aquellos que han cometido delitos o han proporcionado información fraudulenta en el pasado deben ser cautelosos, ya que esto podría complicar su situación durante la entrevista.
Entrevistas consulares y opciones disponibles
Los cubanos, venezolanos y nicaragüenses que han solicitado asilo y no pueden regresar a su país de origen tienen la opción de realizar la entrevista en cualquier país donde no necesiten visa. Por ejemplo, los cubanos pueden optar por Guyana, donde no se requiere visa para entrar.
La abogada Cañizares enfatiza que el perdón tiene tasas de aprobación más altas que las solicitudes de asilo político, lo que lo convierte en una opción atractiva. Además, los solicitantes no necesitan salir del país inmediatamente después de iniciar el proceso; pueden permanecer en Estados Unidos mientras esperan la aprobación de su petición.
¿Cuándo salir del país?
Una vez que se recibe la notificación de la entrevista, el solicitante debe salir del país una semana antes de la misma, realizarse los chequeos médicos y presentarse a la entrevista. Este proceso puede tardar entre tres a cuatro años en completarse, permitiendo que las personas permanezcan con sus familias durante este tiempo.
Es fundamental que los solicitantes trabajen con abogados especializados en inmigración para asegurarse de que todos los documentos y procedimientos estén en orden, ya que cualquier error podría resultar en la negación de su solicitud o en problemas adicionales durante la entrevista.
Situación actual del I-220A
La situación del I-220A sigue sin tener una solución clara. Actualmente, hay apelaciones y demandas en curso que buscan abordar las dificultades que enfrentan los cubanos en esta categoría. Sin embargo, se anticipa que estos procesos pueden tardar mucho tiempo y que las decisiones a favor de los solicitantes son difíciles de lograr.
Por esta razón, la abogada Cañizares aconseja a los cubanos que consideren la opción de la petición familiar, ya que podría ser una alternativa efectiva en medio de la incertidumbre actual del sistema migratorio. La búsqueda de soluciones legales y el asesoramiento adecuado son pasos cruciales para aquellos que desean regularizar su estatus en Estados Unidos.
En conclusión, la abogada Claudia Cañizares reitera la importancia de no tener miedo al proceso del perdón y a aprovechar las oportunidades disponibles para asegurar un futuro más estable en Estados Unidos.