Heriberto Suárez, director nacional de Béisbol en Cuba, asistió como parte de una delegación al partido del pasado domingo entre los equipos de Clase AA Altoona Curve y Richmond Flying Squirrels donde fue entrevistado y los detalles a continuación son traídos por CiberCuba.
Según la publicación, Suárez analizó los rosters de ambos equipos, que jugaron el estadio Peoples Natural Gas Field, interesado por la presencia de varios jugadores de origen dominicano, colombiano y venezolano. El funcionario aseguró que, en caso de que se legalicen en un futuro las contrataciones de peloteros cubanos de la isla con equipos de las Grandes Ligas, muchos de los jugadores firmados terminarían participando en torneos o ligas de nivel similar al que se juega en el Peoples Natural Gas Field de Altoona.
Precisamente, Suárez admitió al respecto que la mayoría de los peloteros de la isla son de un nivel similar al de AA, en gran medida debido a la pérdida de calidad que ha sufrido el béisbol cubano en los últimos años. Pero no solo por eso. Cuba es un país que produce gran cantidad de peloteros, e inevitablemente muchos de ellos no serán superestrellas. De cualquier forma, sus posibles contratos en niveles de doble A significarían un gran aporte monetario para el béisbol cubano, pues los impuestos sobre sus ganancias, cobrados por la Federación Cubana de Béisbol, servirían para mejorar la infraestructura del béisbol en la isla, reparar estadios y terrenos y sufragar los gastos de implementos y salarios de los peloteros.
Hasta ahora, los directivos del béisbol cubano solo se habían mostrado interesados en realizar contrataciones masivas con las ligas del Caribe y Asia, aunque esto siga siendo una utopía.
Sin embargo, la posibilidad de extender los fichajes al inmenso sistema de ligas inferiores de Estados Unidos, cuando sea posible en un futuro, sería ideal para asimilar la gran cantidad de peloteros que surgen en Cuba cada año, no solo por la cercanía con el país del norte, sino porque su capacidad de contratación es muy superior a la de otros países.
En cuanto al sistema de contratación que existe actualmente con peloteros dominicanos o venezolanos, Heriberto Suárez puntualizó fehacientemente que Cuba nunca dejará que sus peloteros se contraten libremente, sin intervención de la Federación. “Respetamos la posición de Venezuela y República Dominicana, pero nosotros tenemos nuestro propio modelo. Tenemos nuestros propios principios con respecto a nuestros peloteros, que no tienen por qué ser iguales que los de otros países”, acotó el director del béisbol en Cuba.
Está claro que la defensa que hace Suárez del derecho de Cuba a fijar sus propias reglas no es el meollo del asunto. Aquí no se trata de modos autóctonos de hacer las cosas, sino de que la Federación —con el INDER y el gobierno moviendo sus hilos—, no quieren perder el control legal sobre los jugadores, entre otras cosas, para poder conservar el sistema centralizado de dirección y gestión del béisbol cubano, que existe en todos los deportes que se practican en la isla.
Aun así, y en espera de épocas mejores, en que los peloteros cubanos puedan elegir libremente con quién y dónde jugar, toda clase de acuerdos que establezca la Federación Cubana de Béisbol con la MLB serán beneficiosos para nuestros jugadores, y consecuentemente, para el desarrollo de la pelota en Cuba.
2 Comentarios