En la ONU, la delegación de Cuba no estuvo de acuerdo a la formación de una comisión que lleve a cabo la investigación de crímenes en la guerra en Siria.
Esta nueva comisión trabajará con la ya existente desde el año 2011, y tendrá como cometido analizar las pruebas de violaciones contra los derechos humanos y las normas internacionales humanitarias que rigen en estos conflictos armados.
El texto que ha sido aprobado hoy a pesar de los votos en contra de un grupo de países que incluye a Cuba, expresa la «necesidad de asegurar la rendición de cuentas»
La (HRW), Human Rights Watch, abogó por aprobar dicha resolución, y en esta dirección instó a todos los estados miembros de esta organización Mundial.
Según esta resolución, la comisión en cuestión también deberá, «crear archivos con el fin de facilitar y agilizar los procesos penales justos, independientes y conformes con las normas del derecho internacional ante cortes o tribunales nacionales, regionales o internacionales, que tienen o tendrán jurisdicción sobre estos crímenes».
El ministerio de Relaciones Exteriores de Francia declaró que, “celebra la adopción -por parte de la Asamblea General de Naciones Unidas el 21 de diciembre- de una resolución orientada a poner en marcha un mecanismo de investigación internacional, imparcial e independiente sobre los crímenes más graves cometidos en Siria”.
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