El vuelo 759 de American Airlines de Atenas a Filadelfia tuvo que realizar un aterrizaje de emergencia después de que se reportara una fuerte turbulencia en el Océano Atlántico.
Diez personas resultaron heridas producto de la turbulencia en el avión, tres pasajeros y siete tripulantes fueron trasladados al hospital al aterrizar, informó American Airlines.
«Hubo sólo una ligera turbulencia durante unos cinco segundos y luego de repente se sintió como si todo el avión estuviera en caída libre», dijo el residente de la ciudad de Nueva York, Alex Ehmke.
«Estamos cuidando a nuestros pasajeros y miembros de nuestra tripulación en este momento y queremos agradecer a nuestros miembros del equipo por mantener a nuestros pasajeros seguros», dijo el comunicado.