Aunque cada nación tiene sus tradiciones para despedir el año viejo, muchas coinciden, como es el caso de las famosas 12 uvas de la buena suerte, extendida por toda América Latina.
En Miami, ciudad donde residen muchos migrantes, la gente está feliz de recibir el 2018, con la mezcla de costumbres, las que traen de su país natal, y las que han adquirido en Estados Unidos.
Jessica Lorenzo, quien tiene su casa en Hialeah, espera a 60 personas un Dj y bailadores este 31 de diciembre.
Los miamenses agradecidos de recibir el nuevo año, se detendrán a esperar que baje la bola de Times Square, mientras piden un deseo por cada uva.
Mientras algunos se dispondrán a darle una vuelta a la manzana con una maleta en la mano para estimular un 2018 de viajes, otros lanzarán cubos de agua para sacar de la casa lo malo de este 2017.
Lorenzo tiene las manos llenas de servilletas con letreros de Happy New Year, y dice a El Nuevo Herald: “Es una fiesta Cuban style, no puede faltar el lechón”.
Los comercios de la ciudad del sol ven el desfile de clientes por estos días de fin de año, a la búsqueda de platos, servilletas, decoración y variedad de comidas para que sus invitados degusten.
Una vendedora de la tienda Happy Fiesta de Doral, comenta: “Se venden muchos globos del 2018. Ya tenemos como 20 pedidos para recoger el 31 de diciembre. Con cada orden se llevan de 15 a 30 globos. Todos dicen: Happy New Year.
Una venezolana, Fátima Orofino recorre los anaqueles de Party City, quiere despedir el Año Viejo en familia, en Doral, con música y comida típica de su país.
“Nosotros escuchamos El Cañonazo”, dice la venezolana, se refiere al título de una canción del género gaita, que despide el viejo año y da la bienvenida al nuevo. Según ella suelen escucharla luego de que el reloj marque las 12 de la noche.
En el International Mall de Doral, el movimiento es incesante, la gente va a buscar ropa y zapatos nuevos para celebrar.
Según Haydée, gerente de la tienda A’Gaci en este centro comercial: “Hay personas que buscan ropa elegante, de mucho brillo, pero también están las que prefieren lo informal. Se lleva mucho el denim ‘ripiado’ con blusas más clásicas. La idea es combinar y no gastar tanto”.
Algunos clientes dicen que en Miami el espíritu de las fiestas de fin de año no se aprecia en la decoración e iluminación de los centros comerciales este 2017.
Carmen Díaz, enseñando una foto que tiene en su teléfono celular del aeropuerto de Chicago todo iluminado, detalla: “Desde que llegué a Miami me pareció que no había mucho espíritu de fiesta. No vi luces de Navidad en el aeropuerto y tampoco hay muchas aquí”.
María, que vive en Miami desde hace 50 años y prepara su fiesta de fin de año para la familia, habla de su país: “En Colombia están iluminadas todas las avenidas, las palmeras”.
Ellas celebran con platos típicos de Colombia, como buñuelos y natilla.
“Hay que batirla como una hora sin parar, pero solo pueden ser dos personas”, explica Carmen, que es un ritual para aproximar a la familia.
(Con información de El Nuevo Herald)