Gracias a la iniciativa del Parole Humanitario lanzada por la Administración Biden en respuesta a la crisis migratoria en la frontera de América del Norte, una abuela cubana de 88 años pudo reunirse con su familia en Estados Unidos.
Manuela Acanda expresó su agradecimiento por la oportunidad que le permitió estar con sus descendientes, incluidos sus hijos, nietos, bisnietos y tataranietos. Ella compartió en una entrevista con Univisión que nunca imaginó experimentar una vida tan plena.
A su llegada el 15 de mayo, Acanda fue recibida por toda su familia en la salida de inmigración del aeropuerto. La anciana residía en Cuba con un hijo que también está en espera del Parole. Como una mujer de casi noventa años, Acanda compartió su intención de pasar los años restantes de su vida aquí.
En enero se inició el proceso Manuela Acanda, sin embargo, no fue aprobada hasta mayo. Cifras filtradas sugieren que hay un atraso de casi 380.000 solicitudes de permiso humanitario, que son únicamente de cubanos, pendientes de aprobación.
El sistema de lotería para distribuir 500 cupos diarios y otros 500 de manera secuencial ha sido anunciado oficialmente por el gobierno como una manera de agilizar el proceso. En el período de cuatro meses de enero a abril, más de 29 000 solicitantes cubanos han obtenido la aprobación.
La capacidad de las autoridades para tratar de manera eficiente y oportuna las solicitudes de Parole Humanitario desde su inicio el 6 de enero se ha visto muy mermada debido a la avalancha de solicitudes. Esto ha provocado una sobrecarga en todo el sistema de procesamiento de casos y demoras significativas en la evaluación de los casos.