La actriz cubana Zajaris Fernández ha compartido recientemente por Instagram un video en una clínica dental en Miami donde la artista ha comenzado un tratamiento de blanqueamiento. En esta ocasión, la artista acudió a dicho centro para cementarse un diente que se le había caído comiendo caramelo. Se trata de un diente que ya se encontraba partido debido a un desmayo que la joven sufrió tras su llegada a los Estados Unidos.
Este singular video donde la actriz dialoga de forma muy amena con su doctora, ha captado la atención de muchos de sus seguidores, quienes con cariño han resaltado la sinceridad y naturalidad de Zajaris que la hace lucir hermosa y única aún faltándole un diente.
En la entrevista ofrecida por ella en el programa La casa de Maka, la actriz revela que su infancia no fue la mejor y que su madre era una persona que al parecer tenía trastornos psicológicos y se la pasaba peleando por cualquier motivo, al punto de que sus lugares favoritos eran la escuela y la casa de su abuela.
Una de las anécdotas a que hace referencia la joven y que denotan el ambiente de violencia en el que creció, es la de cómo aprendió mediante una galleta de su madre la tabla de productos del 6, específicamente la del producto 6×8.
Al decir de la actriz sus complejos sobre su apariencia física quizás se remonten al pasado, pues su madre no la halagaba, por el contrario, disminuía su autoestima con comentarios hirientes sobre sus características físicas.En una ocasión ella cogió piojos y su madre la golpeó con un palo desde la escuela hasta la casa, gritándole piojosa.
Zajaris también narra que estuvo aproximadamente 5 años en Cuba sin ver a su madre luego de que decidiera unirse a su novio Ramón, con quien incluso se casó, pues la señora no aprobaba la relación entre ambos.
Sin embargo la vida le dio la oportunidad de ayudar a su madre y no lo dudó, comprándole un apartamento en Cuba, en el municipio de La Habana del Este.
Actualmente, las relaciones entre madre e hija no son las mejores, pero la actriz ha podido reencontrarse con su hermano menor, quien tiene un niño hermoso, y compartir juntos momentos felices como una familia.
La historia de vida de Zajaris Fernández es un ejemplo de crecimiento personal y sus vivencias le han servido para intentar no repetir patrones erróneos. A pesar de sus traumas en la niñez, la actriz es una persona alegre, optimista y muy auténtica, cualidades que le han permitido ganarse la admiración de todos sus fans.
La historia de vida le ha servido a la actriz para intentar no repetir ese patrón erróneo