Este miércoles las autoridades dieron a conocer la detención de un segundo sospechoso que resultó acusado junto a otro individuo de provocar un incendio el mes pasado en una barbería ubicada en Hialeah.
El presunto criminal, identificado como Alberto Lázaro González, de 55 años y calificado como indigente en el informe de arresto emitido por la policía de la ciudad, enfrenta cargos de robo, incendio premeditado en primer grado y lanzamiento de un dispositivo destructivo, al igual que Miguel Reyes Jr., quien permanece recluido desde el 22 de marzo, día en que ocurrió el lamentable suceso.
De acuerdo a lo expuesto en el informe en cuestión, ambos sujetos fueron captados por una cámara de vigilancia ese día en horas de la mañana mientras se aproximaban a la barbería cita en 60 W. 49th St., destruyendo luego las ventanas de cristal de la parte delantera del local con una llave inglesa y lanzando hacia el interior del mismo dos objetos encendidos que al parecer eran frascos de vidrio.
Tras producirse el incendio, los bomberos de Hialeah acudieron al lugar y lograron extinguir el fuego.
Sin embargo, los daños causados por el siniestro ascendieron a más de $100,000, según el informe.
Agentes de la policía revelaron que el dueño de la barbería reconoció enseguida a Reyes, pues este había trabajado en la misma y a González, a quien había contratado para que le prestara determinados servicios relacionados con el mantenimiento del establecimiento.
Además, el informe indica que el video de vigilancia muestra a Reyes pronunciando el nombre de su cómplice durante el desarrollo del suceso.
La policía arrestó a González luego de detectarlo transitando en una bicicleta cerca de la intersección de East Eighth Avenue y East 65th Street, en Hialeah.
El documento en cuestión no hace alusión a los motivos que conllevaron a estos hombres a ocasionar el incendio.
La semana anterior en un comunicado de prensa, el Oficial Principal de Finanzas de la Florida y Jefe de Bomberos del Estado, Jimmy Patronis, manifestó: «El incendio premeditado es un delito grave y malicioso que no toleraremos en Florida. Como alguien que pasó su vida en la industria de restaurantes, entiendo lo difícil que es construir, mantener y proteger una pequeña empresa, y que los medios de vida de los propietarios de pequeñas empresas de la Florida sean destruidos por matones, quiero hacer todo lo que pueda como Oficial Principal de Finanzas y Jefe de Bomberos del Estado de la Florida para responsabilizar a esos delincuentes.
Asimismo, agregó: «Muchas gracias a los bomberos del Departamento de Bomberos de Hialeah y a mis detectives de la Oficina de Investigaciones de Incendios, Incendios Premeditados y Explosivos por todo su arduo trabajo y esfuerzo para mantener seguro a nuestro estado y a nuestras comunidades».
Hasta el día de ayer, Reyes y González se hallaban detenidos en el Centro Correccional Turner Guilford Knight y no se les había impuesto fianza.
En caso de que se determine su culpabilidad, ambos podrían estar hasta 30 años en prisión.