El alcalde de Hialeah, Carlos Hernández, anunciĂł este martes que la policĂa de la ciudad y los oficiales de cumplimiento de la ley no impondrán multas a los restaurantes que quieran reabrir sus comedores interiores.
La medida, que será aplicada solo dentro de la jurisdicciĂłn de la ciudad, llega luego que Hernández haya pedido al alcalde del condado en mĂşltiples ocasiones que se permita la reapertura de este sector de la economĂa. Las sĂşplicas de Hernández no han sido respondidas.
“Me encantarĂa tener una explicaciĂłn de por quĂ© Broward, nuestros vecinos, que han mantenido abiertos los restaurantes, por supuesto siguiendo las regulaciones como lo hicimos aquĂ”, dijo Hernández, “¿CĂłmo es que sus nĂşmeros no están por las nubes?”.
A diferencia de Miami-Dade, el condado de Broward no prohibiĂł las comidas en interiores. En cambio, el alcalde de Broward, Dale Holness, implementĂł lĂmites de capacidad. Cuando se implementaron las restricciones, el nĂşmero de casos de COVID-19 y la tasa de positividad de las pruebas era menor en Broward que en Miami-Dade.
GimĂ©nez por su parte este lunes dijo que está analizando la posibilidad de deshacerse de la prohibiciĂłn, pero cuando lo haga impondrá un lĂmite de capacidad. Tampoco especificĂł para cuando entrarĂan en efecto estos cambios.
La ciudad de Hialeah debe obedecer las Ăłrdenes de su gobierno local tanto asĂ como de su condado. Mientras que Hernández pide a su policĂa que no multe a los restaurantes está por ver que respuesta da al respecto el alcalde de Miami Dade.
Mientras que los restaurantes permanecen cerrados en su interior, Giménez y el gobernador Ron DeSantis también anunciaron el lunes que se permitirá un máximo de 13,000 fanáticos de la NFL en el primer partido en casa de los Miami Dolphins el 20 de septiembre contra los Buffalo Bills en el Hard Rock Stadium en Miami Gardens.
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