Amanda Lemus, la pequeña cubana que tuvo que ser intervenida quirúrgicamente en Madrid, esta semana, evoluciona satisfactoriamente, de acuerdo a su familia.
La niña que padecía una atresia de las vías biliares, tuvo que viajar con sus padres a España, para ser atendida en el hospital La Paz de la capital española, para someterse a un transplante de hígado, del que su padre fue el donante, ya que en la Isla era imposible hacer esta operación.
Según la activista Yamilka Lafita, quien ha colaborado muchísimo en el proceso de divulgar este caso, para que la niña recibiera la ayuda de los emigrados cubanos, reveló que Amanda fue operada con éxito por los médicos españoles, sobre ellos, dijo «estar eternamente agradecida».
«La beba aún no despierta, los médicos pasaron por allí hace poco la vieron, hicieron un ultrasonido y después regresarán para conversar con Mila [la madre] sobre cómo debe ser todo», precisó en redes.
«Amanda deberá entrar al salón nuevamente, ya que ayer se decidió no suturar la herida. Este proceso es totalmente normal en las intervenciones para trasplantes. Esperamos por nuevas decisiones. Pasó la noche bien, todo lo que debe ser monitoreado está siéndolo y la disposición para que todo continúe avanzando está», agregó en un post poco después.
Lara Crofs, como también se hace llamar la activista en Facebook, detalló que el padre de la pequeña Emmanuel Lemus, de igual modo evoluciona satisfactoriamente tras la cirugía.
La activista y otros cubanos dentro y fuera de La Mayor de las Antillas, lograron lanzar una campaña para reunir fondos que pudieran solventar el viaje de Amanda y de sus padres a España, y hallar un hospital interesado en ayudar en el caso de la niña cubana.
Cuando Amanda llegó al país europeo hace algunas semanas, los médicos habían dicho que el deterioro de la menor era tal que debían esperar más tiempo para estabilizar algunos parámetros, antes de operar.
Afortunadamente los pronósticos de los profesionales de la salud no se cumplieron y pudieron hacer el transplante bastante rápido, sin embargo al ver el estado de la niña, los médicos españoles no entendían cómo en Cuba se perdió tanto tiempo.
De no ser por las insistentes publicaciones de sus padres denunciando la situación desde la Isla, y el esfuerzo de la diáspora, la vida de Amanda no hubiese podido salvarse.