Amenazan a una anciana cubana residente en Estados Unidos por grabar en una cola  en La Habana

Gloria Morejón, de 62 años de edad y ciudadana estadounidense, fue amenazada por grabar una cola en La Habana, cuando el 3 de enero en la dulcería panadería ubicada en la calle 24 de febrero esquina Perdomo, en Regla, quería mostrarle a su esposo a través de WhatsApp la longitud de la misma que la mantuvo más de 20 minutos en ella para poder comprarle a su nieta un cake.

Una mujer le exigió que no la grabara:

«Cuando saco mi teléfono, una señora que estaba a pocos pasos de mí me dice: ‘A mí no me grabe’. ‘Ok’, le respondo. Respeté su decisión. Pero automáticamente un hombre me dice que si seguía grabando me iba a partir la cara, y gesticula en forma de amenaza sobre mí», contó  la anciana a CiberCuba.

Según Gloria el hombre le dijo sin motivo alguno: «Oye, come pinga»

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— Cuba en Miami (@cubaenmiami) January 16, 2023

En la grabación que hizo Gloria se puede ver al hombre de unos 50 años haciendo un movimiento amenazante hacia ella como para pegarle, con el dedo amenazante le dice que se deje de hacer la graciosa:

«No, yo no me estoy haciendo la graciosa, yo lo que creo que usted se está metiendo en una conversación que yo tenía con ella. Yo grabo lo que yo quiera. Usted está equivocado», le respondió.

Gloria menciona que está consciente que no está permitido grabar actos públicos que guarden relación con la política pero no era el caso, señala que estaba fuera de lugar la amenaza física y mucho más por ser una señora de la tercera edad:

«Además, ¿por qué la amenaza física? Tengo 62 años y soy mujer»

Cuenta Gloria que en dos ocasiones llamó a la policía ya que se sintió abusada por un hombre que estuvo a punto de golpearla y le profirió palabras ofensivas sin razón alguna, sin embargo después de transcurrida una hora no se presentaron en el lugar del incidente, por lo que decide irse sin comprar el cake:

«En espera de la policía y continuando en mi cola volví a hacer una segunda llamada, pero jamás sirvieron mis súplicas. Nunca acudió al lugar, allí permanecí durante una hora y decidí irme sin cake y aterrada del lugar, desprotegida y con miedo. Aquí les envío el video para que al menos hagan público el rostro de este abusador»