La directora de Amnistía Internacional para las Américas, Erika Guevara- Rosas, recordó a Mariela Castro Espín, a propósito del tuit en el que la hija del ex gobernante Raúl Castro llama «cipayo dictador» a Sebastián Piñera, presidente de Chile, que tiene tejado de vidrio, informa Diario de Cuba.
La hija de Raúl Castro, el mismo que bajo su gobierno y ahora como 1er secretario del partido [único] comunista dirige una política de represión en contra de quienes se atreven a disentir, condena la represión en #Chile. Un clasico “mejor no me ayudes” 🤦🏻♀️https://t.co/ucLD6DhQTD
— Erika Guevara-Rosas (@ErikaGuevaraR) October 26, 2019
Guevara-Rosas contestó a la directora del Centro Nacional de Educación Sexual (CENESEX) con un tuit en el que puntualiza: «la hija de Raúl Castro, el mismo que bajo su Gobierno y ahora como primer secretario del partido [único] comunista dirige una política de represión en contra de quienes se atreven a disentir, condena la represión en Chile. Un clásico ‘mejor no me ayudes,'».
Mejor que condene la detención arbitraria de Nelva Isamarays y su bebé, así como la de su esposo @jdanielferrer, líder de la @Unpacuoficial, y de todas las personas presas por motivos políticos en #Cuba
— Erika Guevara-Rosas (@ErikaGuevaraR) October 26, 2019
La funcionaria de igual modo advirtió a Mariela Castro que «mejor que condene la detención arbitraria de Nelva Isamarays y su bebé, así como la de su esposo José Daniel Ferrer, líder de la UNPACU, y de todas las personas presas por motivos políticos en Cuba».
Anteriormente cientos de cubanos reaccionaron en Twittter a la acusación que hizo Castro a Piñera a mediados de la semana pasada, el presidente chileno es una figura crítica con el régimen cubano, y también ha sido blanco de ataques del Gobierno de la Isla en varias oportunidades por su apoyo a sectores de la oposición cubana.
Sebastián Piñera pidió perdón a la ciudadanía en días recientes con motivo de las protestas en Santiago de Chile y en otras ciudades del país latinoamericano, producto del vandalismo y de la «guerra subversiva» propiciada por las izquierdas, que hasta ahora han cobrado en tan solo unos días 19 vidas.