La semana pasada una anciana cubana nombrada Eralia FernĆ”ndez Ferra cumpliĆ³ 101 aƱos en la isla, un dĆa especial en el que estuvo acompaƱada de sus seres queridos, entre ellos, su hijo Carlos Agrenot y su nieta Zisleysi.
Su cumpleaƱos se convirtiĆ³ en una razĆ³n fundamental para celebrar la vida y agradecer la existencia de una persona maravillosa que ha regalado tanto amor y sabidurĆa a quienes han tenido la dicha de conocerla.
Su historia es un reflejo del coraje y el optimismo que caracterizan al pueblo cubano y su longevidad es el resultado de su fortaleza espiritual, que se traduce en un valioso cĆŗmulo de experiencias vividas con total plenitud.
Uno de los parientes cercanos a Eralia radicado en los Estados Unidos, pero muy orgulloso de sus raĆces cubanas, tambiĆ©n felicitĆ³ a la abuelita por un aƱo mĆ”s de vida, compartiendo con el medio digital de noticias CiberCuba una foto de ella, tomada durante su fiesta de cumpleaƱos. Este hecho pone de manifiesto que los vĆnculos familiares y el afecto desarrollado hacia una persona son capaces de superar la distancia fĆsica y permanecer para siempre.
La imagen enviada recrea a una seƱora llena de salud con una apariencia adorable y se erige como un recordatorio de que la vejez, amƩn de las limitaciones y de los cambios que supone, es una etapa mƔs de la vida que hay que aprender a disfrutar.
La familia de Eralia aprovechĆ³ la ocasiĆ³n para expresar su eterna gratitud hacia los cubanos Silvia NĆ”poles Viaponte y RaĆŗl de JesĆŗs Estevez Figueroa por la excelente labor desempeƱada como cuidadores de la anciana, una labor que ha tenido como motor impulsor al amor.
Sin lugar a dudas Eralia es un ejemplo de perseverancia y su vida demuestra que la atenciĆ³n y el cariƱo brindados muchas veces son recompensados con creces.