Autoridades locales en los Cayos de la Florida aprobaron un plan para liberar aproximadamente 750 millones de mosquitos modificados genéticamente.
El plan que habría recibido objeción por parte de residentes locales y defensores ambientalistas ya había sido aprobado por las autoridades estatales y federales.
«Con todas las crisis urgentes que enfrenta nuestra nación y el estado de Florida – la pandemia de Covid-19, la injusticia racial, el cambio climático – la administración ha utilizado dólares de impuestos y recursos gubernamentales para un experimento de Jurassic Park», dijo Jaydee Hanson, directora de políticas de el Centro Internacional para la Evaluación de Tecnología y el Centro para la Seguridad Alimentaria, en un comunicado emitido el miércoles.
«Ahora el Distrito de Control de Mosquitos del Condado de Monroe ha otorgado el permiso final necesario. ¿Qué podría salir mal? No lo sabemos, porque la EPA se negó ilegalmente a analizar seriamente los riesgos ambientales, ahora sin una revisión adicional de los riesgos, el experimento puede continuar, » ella añadió.
Aprobado por la Agencia de Protección Ambiental en mayo, el proyecto piloto está diseñado para probar si un mosquito modificado genéticamente es una alternativa viable a la pulverización de insecticidas para controlar el Aedes aegypti la especie portadora de varias enfermedades mortales, como Zika, dengue, chikungunya y fiebre amarilla.
El mosquito, llamado OX5034, ha sido alterado para producir crías hembras que mueren en la etapa larvaria, mucho antes de eclosionar y crecer lo suficiente como para picar y propagar enfermedades. Solo el mosquito hembra pica en busca de sangre, que necesita para madurar sus huevos. Los machos se alimentan únicamente de néctar y, por tanto, no son portadores de enfermedades.
El mosquito también está aprobado para ser liberado en el condado de Harris, Texas, a partir de 2021, según Oxitec, la compañía británica de propiedad estadounidense que desarrolló el organismo genéticamente modificado.