El gobernador de la Florida, Ron DeSantis, firmó una nueva ley que permitirá a miembros del cuerpo de paramédicos a lo largo del estado ir armados en situaciones de «alto riesgo».
Los profesionales médicos que portan armas de fuego estarán obligados a tomar una capacitación anual sobre seguridad de armas de fuego y entrenamiento táctico, según la ley aprobada que entrara en efecto el 1 de julio.
Las situaciones de alto riesgo consideradas principalmente serían: tiroteos, operaciones antidrogas, incidentes de personas atrincheradas o personas suicidas armadas.
De acuerdo a lo establecido en la nueva ley los paramédicos no tendrán que retirarse y están justificados en el uso de la fuerza para defenderse a sí mismos u otros de daños corporales.
Los estados de Kansas y Ohio ya cuentan con leyes de respuesta ante emergencias y armas de fuego. Proyectos de ley similares se han propuesto en Tennessee, Mississippi y Virginia, informó FOX 6 Now.
La ley llega un mes después de que el gobernador firmara otro proyecto de ley que permitirá a maestros en las escuelas portar armas para hacer frente a posibles masacres escolares.