El domingo la policía de Hialeah arrestó a un cubano de 53 años de edad que conducía una SUV de color oscuro reportada como robada por las calles de la ciudad. Los oficiales al detener el vehículo identificaron al individuo como Misael González Rodríguez quien, además tenía una licencia de conducción vencida desde el año 2023.
La detención tuvo lugar en la intersección de la avenida 5 y la calle 49 al este de la Ciudad que Progresa en horas de las 4:00 pm cuando un oficial patrullaba la zona y se percató de que el vehículo circulado transitaba por la zona lo que lo conllevó a detenerlo.
En el momento de revisión de los documentos del auto en la zona del arresto el agente de la patrulla observó que los números que identifican al vehículo estaban modificados y la matrícula 43AKSE se encontraba entre las reportadas como hurto.
En el momento de la detención el individuo presentó una contingencia médica urgente que provocó a que los oficiales lo trasladaran al Hospital de Hialeah para que recibiera atención médica especializada. Una vez que los médicos atendieron a Misael y lograron estabilizar su estado de salud le dieron alta del centro hospitalario y la policía lo transportó a un centro penitenciario del condado.
En el día de ayer lunes González Rodríguez compareció ante un juez de Miami-Dade bajo los cargos de tenencia de un vehículo con identificación alterada y robo en menor cuantía, delito considerado por la justicia local como de segundo grado.
El magistrado fijó una fianza de 2.500 dólares por el cargo de tenencia de un vehículo con identificación alterada. En el supuesto de que el acusado no pueda abonar el monto impuesto por el juez tendrá que terminar con el programa pretrial; este no es más que un programa de intervención previa al juicio, también conocido como programa de desviación previa al juicio, es una alternativa en el sistema de justicia penal que permite a los acusados, generalmente de delitos no violentos y sin antecedentes penales graves, evitar una condena penal. Tienen el objetivo de rehabilitar a los participantes y evitar que vuelvan a reincidir en actividades delictivas.
Por otro lado, el medio de transporte quedó en manos de las autoridades con el fin de someterlo a una investigación más detallada para establecer posibles evidencias que lleven el caso a sus verdaderos ladrones. Los detectives mantienen el caso abierto para continuar la búsqueda de otros elementos que permitan determinar si Misael ha estado involucrado en otros delitos como estos, así como la venta de automóviles robados en la ciudad.
