Arrestan en Hialeah a hombre que se dedicaba a las peleas de gallos

La policía de Miami-Dade arrestó este jueves a un hombre vinculado a operaciones de cría, entrenamiento y peleas de gallos en la ciudad que progresa. El hombre de 58 años de edad fue identificado como Juan Romero según refiere la orden de arresto.

Las autoridades descubrieron el local que se empleaba para el entrenamiento y peleas de gallos como resultado de una operación por fraude que se realizó en la cuadra 4600 de E 10th Lane. Los oficiales tropezaron con un gran número de jaulas individuales, colocadas en un callejón que los encaminó hacia un local destinado para las peleas de gallos.

Los agentes hicieron una búsqueda más exhaustiva y encontraron un gran número de estos animales con características que evidenciaban que eran utilizados en las peleas, tales como las patas sin plumas y una esponja roja con forma de gallo que se emplea para el entrenamiento de los mismos.

El informe del arresto señala además que cuando las autoridades contactaron a Juan este admitió ser el dueño de las aves. Cuando los investigadores entraron al local del negocio de autopartes descubrieron un ring de peleas y un total de 160 gallos que se empleaban para las peleas.

«Se determinó que el señor Romero estaba criando y entrenando a estos gallos para pelear y los tenía en el sitio de su negocio», dijo la policía de Hialeah en una nota. Romero fue arrestado por cargos de posesión de animales para peleas, posesión ilegal de equipo para peleas de animales y uso de una propiedad para la práctica de peleas de animales.

Los oficiales remitieron al hombre al Centro Correccional Turner Guilford Knight donde se fijó una fianza de $5.000 dólares.

Las peleas de gallo en Estados Unidos son ilegales ya que es un deporte de sangre brutal que consiste en colocar dos gallos en un área pequeña y cerrada para que peleen entre sí hasta la muerte o hasta que uno resulte gravemente herido. A pesar de la ilegalidad de estas peleas sigue siendo un tema a solucionar por las autoridades del estado del sol, el cual cuenta con una alta población latina y del Caribe donde normalmente son más aceptadas estas peleas.

Las peleas en este estado más bien se producen en áreas rurales remotas, almacenes urbanos. Los organismos encargados para proteger a estos animales trabajan para descubrir estos locales y cerrar estas operaciones ilegales, pero todavía existen.

Según las leyes de Florida tanto participar como asistir a una pelea de gallos se considera ilegal y las sanciones pueden incluir cargos por delitos graves por organizar, promover o realizar una pelea de gallos. Cargos por delitos menores por asistir o apostar en estas peleas. El decomiso de la propiedad o equipo utilizado para la actividad ilegítima, en las que se incluyen también las aves. Así como multas y posible prisión para los que sean declarados culpables.