Autoridades de Salud en Cuba están marcando las casas de enfermos de Covid-19, lo que significa una violación de la privacidad de los ciudadanos

Autoridades de Salud en Cuba están marcando las casas de enfermos de Covid-19, lo que significa una violación de la privacidad de los ciudadanos/Imagen de archivo

Profesionales cubanos están criticando una nueva práctica de las autoridades de salud en la Isla, quienes han estado marcando las viviendas de los enfermos de Covid-19 en las últimas semanas, cuando esto podría suponer una violación a la privacidad de las personas que han contraído el virus, informa Martí Noticias.

Fuentes consultadas por la emisora del exilio, vía telefónica, explicaron que se trata de un sello que se pega en la fachada de las casas, para dejar claro al resto de la población, que en esa vivienda hay personas enfermas de coronavirus, la modalidad ha empezado a ponerse en práctica en La Habana, Pinar del Río y Matanzas.


Es una «pegatina redonda con algo rojo en el medio», dijo la activista Leticia Ramos Herrería residente en Cárdenas, Matanzas, quien vio este sello en una vivienda del reparto 13 de marzo.

El independiente diario digital 14yMedio publicó recientemente se vieron este tipo de pegatinas en la calle Zanja, de la capital, también en Guane, en la occidental provincia de Pinar del Río se han alcanzado a ver algunas.

«Aunque está estipulado en el código de ética médica, en Cuba no está legislada la protección a la privacidad de los pacientes», detalló Laritza Diversent una abogada cubana residente en EEUU.

Por su parte, Nelson Gandulla médico cubano, exiliado en España, piensa que «eso va contra toda ética médica y se está violando todo el derecho que tiene la persona de decir o no decir que está enfermo».

Una de los problemas para reclamar los derechos, opinó la antropóloga Miriam Celaya, residente en la capital, es que los mismos no se conocen.


Celaya advirtió que si a ella le ponen un sello en la puerta lo retira, «porque así como no existe una ley que prohíbe ponerla, tampoco existe una que dice que yo tengo que aceptarlo».


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