Este viernes un avión de la aerolínea estadounidense United Airlines tuvo que aterrizar de emergencia en el Aeropuerto Internacional de Los Ángeles (LAX), cuando se dirigía a la Ciudad de México con 110 personas a bordo, entre ellos la tripulación. El incidente fue consecuencia de un fallo en el sistema hidráulico de la aeronave el cual favorablemente no tuvo males mayores.
Este hecho se suma a otros de la misma aerolínea que ocurrieron esta semana lo cual enciende las alarmas de los pasajeros y encargados de su seguridad. El vuelo 821 despegó desde el Aeropuerto Internacional de San Francisco con destino a la capital azteca, pero tuvo que aterrizar sobre las 4:30 en Los Ángeles según un comunicado que divulgó la Administración Federal de Aviación (FAA), la cual detallo que los pasajeros desembarcaron de forma segura al igual que la tripulación.
Fox News declaró que los viajeros fueron ubicados en otra aeronave con el objetivo de que llegaran a su destino. Nicholas Prange, vocero del Departamento de Bomberos de Los Ángeles manifestó a The Assiciated Press que los camiones de bomberos estuvieron en la pista hasta que aterrizó la aeronave por si era necesario su servicio, pero favorablemente no tuvieron que intervenir.
El Airbus 320 al parecer presentó problemas con uno de los tres sistemas hidráulicos para fines de redundancia, según informó United. Las autoridades de FAA comunicó que harían una investigación para determinar cuáles fueron las causas que originaron esta falla.
Horas antes de este hecho otra aeronave rodó por el césped del Aeropuerto Internacional George Bush en Houston, después de tocar tierra firme. Al detenerse el avión los pasajeros desembarcaron en la pista y los transportaron en un autobús hasta la terminal, según Fox Business.
United Airlines dijo a Fox 26 en ese momento: «Estamos retirando el equipaje del avión y trabajaremos para reunir a los clientes con sus pertenencias lo más rápido posible. Estamos agradecidos por las acciones de nuestra tripulación para desembarcar a todos los pasajeros de manera segura».
Un día antes otro avión de United despegó del Aeropuerto Internacional de San Francisco y se desvió hacia Los Ángeles también porque en el despegue perdió uno de sus neumáticos y dañó a varios automóviles que estaban estacionados en el aeródromo. La aeronave transportaba a 249 personas entre ellos 10 asistentes de vuelo y cuatro pilotos.
Un portavoz de la aerolínea dijo que: «El 777-200 tiene seis neumáticos en cada uno de sus dos puntales principales del tren de aterrizaje. La aeronave está diseñada para aterrizar de manera segura con neumáticos faltantes o dañados».
Una semana antes un vuelo que salió desde Texas y aterrizó en Menphis como resultado de que empezara a disparar llamas en uno de sus motores minutos después del despegue. Las autoridades de FAA se encargan de investigar cada uno de los hechos para determinar el origen de sus fallas en un claro compromiso por la seguridad de los pasajeros y tripulantes.