Óscar Pérez, quien dirige Liquor King,explica el incidente ocurrido el domingo en su negocio al llegar un cliente que preguntó por un vino, pero cambió de opinión y decidió que prefería el champán. Luego pareció indeciso y le pidió que fuera hasta la parte de atrás de las estanterías de vino, al parecer para que lo aconsejara. Se acercó a él, tuvo una breve conversación y le mostró algunos artículos. Finalmente, dijo que no quería comprar nada y se fue rápidamente.
El propietario echó un vistazo a los estantes y se dio cuenta de que algunas de sus botellas habían desaparecido misteriosamente:
«Cuando miro una de las estanterías, veo que me había robado botellas”
Al revisar las imágenes de las cámaras de vigilancia, Pérez y su personal notaron que el hombre que inicialmente entró a la tienda para preguntar en realidad estaba acompañado por otras dos personas que inicialmente habían permanecido afuera de la tienda.
“Cuando uno abre la puerta suena un timbre, pero entonces, uno de los ladrones quedo sujetando la puerta y yo no escuché desde atrás que entraba alguien“,dijo Pérez.
Ese domingo, una hora antes del robo, el ladrón había visitado la licorería y realizó una serie de averiguaciones antes de partir con las manos vacías.
Uno de los ladrones había estado merodeando la tienda una semana antes, lo que preocupó a uno de los empleados que notó el comportamiento sospechoso del individuo.
Sin embargo, el importante robo no se produjo hasta el pasado domingo, ya que anteriormente creen haber sido robados por los mismos individuos pero no se dieron cuenta.
En la estantería de vinos habían 4 botellas de vino Opus One, solo quedaba una, ese domingo los ladrones se llevaron dos por lo que la tercera pudo haber sido robada por los mismos ladrones. Las dos botellas de vino Opus One fueron valuadas en casi 900 dólares. Si se hubiera incluido la tercera botella, el importe total habría superado los 1.300 dólares. Desafortunadamente, el propietario está perdido porque carece de cobertura de seguro para estas pérdidas.
Hace más de dos décadas, Oscar Pérez estableció su licorería inaugural en Miami, manteniendo la práctica habitual de su familia colombiana.
Según el dueño ya están acostumbrados un poco a esta situación: «Yo tengo otras licorerías en Miami Gardens, Hialeah también, y nosotros siempre les damos a la policía los videos y a veces los cogen y a veces no”.
Pérez se muestra optimista acerca de que esta vez la policía atrape rápidamente a los ladrones. Además, han comenzado a realizar mejoras en el servicio al cliente, centrándose en estar atentos a la puerta y a cómo asegurarla cuando están lejos del mostrador.
Si tiene alguna información sobre las personas que se ven en el video o cualquier detalle relacionado con este asunto, no dude en comunicarse con la línea directa de Miami-Dade Crime Stoppers al (305) 471-8477.
