La influencer y presentadora española Anabel Pantoja estuvo disfrutando de unas vacaciones de verano en Cuba, sin embargo a su regreso a España se ha enterado de que ha acaparado titulares en la prensa, por un gesto que tuvo con niñas en La Habana, que muchos interpretaron como una ofensa, a las pequeñas y a la pobreza que experimentan en el país comunista.
Anabel Pantoja haciéndose un Dulceida de verdad esta gente no tiene cabeza? pic.twitter.com/4v2w6C5QEC
— #SalvameNoSeToca 🏳️🌈 (@REALITIES_TELE5) August 28, 2019
La sobrina de la famosa cantante Isabel Pantoja, iba a bordo de un bicitaxi, cuando se detuvo para regalar cosméticos y unas gafas de sol a dos niñas en medio de La Habana Vieja, al tiempo que etiquetó a las marcas que patrocinaron el regalo, y lo colgó en su cuenta de Instagram, una actitud que ha causado un gran revuelo en la prensa y en las redes, donde usuarios han calificado su comportamiento como «vergonzoso», además de tildarla de reproducir el arquetipo del blanco colonizador.
Pido perdón como español por la vergonzosa imagen de Anabel Pantoja aprovechándose de unas niñas cubanas para promocionar complementos de belleza, reproduciendo el repugnante arquetipo del #WhiteSavior y mostrando una despreciable actitud colonial.pic.twitter.com/cidzFmJVVN
— Juan Naranjo (@Juan_Naranjo_) August 28, 2019
La instagramer aprovechó su viaje a Cuba, para visitar el popular restaurante La Bodeguita del Medio, probar los deliciosos tragos de la Isla, disfrutar del mar y subirse en un auto clásico.
Anabel también publicó en redes sociales, que hizo donaciones de comida y ropa a una iglesia en La Habana, momento que fue reproducido en Twitter por algunos seguidores que salieron en su defensa.
Anabel Pantoja llevando comida y ropa a los mas necesitados, antes de dar gafas y pintalabios a dos niñas pequeñas, pero esto no interesa. #GHVIP7 #AnabelPantojaIsOverParty pic.twitter.com/nRWviXB3p4
— ♥⚔️ (@Zuri_mlsb) August 28, 2019
Al enterarse de la polémica, la influencer usó nuevamente las stories de Instagram, para publicar un vídeo en el que aclara que no estaba haciendo publicidad a la marca de gafas, con las niñas cubanas, sino que las marcas le dieron un montón de cosas para regalarlas, y que no quiso dañar la moral de nadie.
«Lo he hecho con muchísimo gusto sobre todo para darle una ilusión a esos niños, y para nada que sea publicidad», explicó, argumentando que seguirá haciendo lo que le de la gana, y lo que le salga del corazón, aunque pidió disculpas y borró los vídeos.
«Jamás haría nada en contra de un menor, porque adoro a los niños», concluyó.
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