El régimen cubano dice que ha confiscado más de cuatro toneladas y media de drogas, entre enero y octubre de 2017, en su mayoría marihuana, y otras sustancias que “no tenían como destino a la Isla”, informó el diario estatal Granma.
Las cifras de droga supera el total de sustancias que fueron incautadas en 2015 y 2016.
“El impacto en nuestro entorno geográfico del desfavorable comportamiento del tráfico y consumo ilícito de estupefacientes a nivel global, derivado del aumento de la producción, oferta y consumo”, alega el Gobierno debido al incremento de sustancias incautadas.
Granma, Guantánamo y la costa sur desde Pinar del Río hasta Camagüey, incluyendo a la Isla de la Juventud fueron las regiones con una incidencia más notable de detección de drogas durante este año, que aún no termina.
A cargo de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR), la Operación Aché III, argumenta la prensa oficial, detectó en 2017 unos 244 hechos de recalos, con 4.571 kg de drogas (4.462 kg de marihuana y 109 kg de cocaína), de igual modo advirtió 63 lanchas rápidas sospechosas de vincularse al tráfico de drogas.
Asimismo, disminuyeron los paquetes de cocaína, y predominaron las pacas de marihuana.
Igualmente, durante 2017, los militares cubanos han esclarecido 18 hechos de escamoteos de droga recalada, por lo que se ocuparon 41,28 kg de drogas, y resultaron arrestados 46 cubanos.
En la frontera aérea se frustraron 43 operaciones de narcotráfico internacional, en las que fueron detenidos 54 extranjeros y se decomisaron 55 kg de sustancias.
“Fueron detectados 46 casos de extranjeros con pequeñas cantidades de drogas para consumo personal, a quienes se les ocupó la sustancia, se advirtieron sobre las regulaciones internas y fueron multados”, añade Granma.
También se señala que dentro de Cuba, persiste el uso indebido de fármacos y los cultivos de marihuana en zonas alejadas.
(Con información de Diario de Cuba)