Recientemente fue publicado en redes sociales un video que recrea la controversia suscitada entre las empleadas del salón de belleza Yanka’s Hair Extensions y una cliente que asistió al mismo para colocarse extensiones de cabello, quien se negó a pagar los 1,200 dólares correspondientes al servicio cuando este ya estaba casi terminado.
En dicho video aparece la mujer rodeada por tres empleadas manifestando: «Oye que me dejes tranquila, que tú no eres ni mi mamá ni mi papá, yo tenía las mejores intenciones de pagarte porque yo tengo dinero, como tú me vas a decir que no».
Una de las trabajadoras del local decidió llamar a la policía y la cliente, sumamente exaltada, intentó quitarle su teléfono móvil para impedirlo. Entonces quiso salir del salón mientras las empleadas le reclamaban por solicitar un servicio sin contar con el dinero necesario y le exigían que debían retirarle las extensiones si no efectuaba el pago requerido.
En otro audiovisual compartido posteriormente por la cubana que se encuentra a cargo del negocio en cuestión, esta alegó que desde que la mujer ingresó al salón ella tuvo la intuición de que se generarían problemas, sin embargo, destacó que «tampoco uno puede juzgar a las personas por su apariencia».
Asimismo, explicó que en la fase final del procedimiento estético cuando se le comunicó a la cliente el monto que debía pagar, esta asumió un comportamiento bastante desagradable, protagonizando una penosa escena que se ha vuelto viral en las últimas horas.
Al respecto, señaló: «Es muy triste que uno esté tratando de salir adelante y que vengan todas estas descaradas, porque son unas descaradas, a intentar robarle a uno por un servicio de pelo, a buscarse un problema por un servicio de pelo, que no es una medicina, que no es un plato de comida, que son extensiones de cabello, es un lujo, no es una necesidad».
Además, recalcó que ese hecho no terminaría así y que la estafadora «se llevó su merecido», aunque no ofreció detalles de lo que ocurrió con la mujer ni precisó si efectivamente la denunció ante la policía.
Igualmente, lanzó la siguiente advertencia: «El que venga a mi salón yo me voy a defender. Está bueno ya de que uno no haga nada. Está bueno ya de que vengan, te hagan trabajar cuatro y cinco horas a tus empleados y que vengan y te roben. El que venga a mi salón a joderme yo me voy a defender. Yo estoy en mi propiedad. Uno pasa mucho trabajo para salir adelante».
La cubana también exhortó a sus colegas a que les enviaran las fotos de quienes hayan incurrido en este tipo de conductas en sus negocios a los efectos de publicarlas en sus redes sociales e impedir que otras personas sean víctimas de actos de estafa.
Por último, expresó: «La pelea no va a ser fácil. Es muy triste que tú estés tratando de salir adelante en este país, que tú pagues tus taxes y que venga una descarada a robarte».
El sitio de sucesos Only in Dade compartió el video en su perfil de Instagram y hasta el momento acumula más de 2,000 comentarios que hacen énfasis en como actitudes de esta índole propician el surgimiento de una percepción de la comunidad cubana en extremo negativa, lo cual es muy lamentable.