Cubano buscando alimentos en depósitos de basura en el Parque Heredia, en Santiago de Cuba

Cubano con trastorno mental y sin tratamiento médico deambula por las calles de Santiago de Cuba en busca de alimentos en los depósitos de basura, un vídeo en el que se ve el lamentable panorama fue publicado en Twitter por el Observatorio Cubano de Derechos Humanos.

Supuestamente la grabación se habría hecho en la calle del parque Heredia de la cabecera provincial, de acuerdo al tuit.

Santiago de Cuba. Señor con problemas mentales y sin tratamiento médico deambula por el parque en la calle Heredia, revisando los depósitos de basura en busca de alimentos.#SOSCuba #CubaTieneQueCambiar #CubaNoEsComoTeLaCuentan #Cuba pic.twitter.com/OqB23AjS59

— Observatorio Cubano de Derechos Humanos (@observacuba) June 1, 2023

Escenas como estas son cada vez más frecuentes en la Mayor de las Antillas, un país en el que el envejecimiento poblacional y la miseria están a la orden del día, tras 64 niños de dictadura.

Cuba es un país del que emigra casi toda la población en edad laboral por la crítica situación económica-politica y social bajo el régimen totalitario de Miguel Díaz-Canel y Raúl Castro. Dicho contexto ha traído como consecuencia que la mayoría de las personas de la tercera edad envejezcan solas en la Isla cárcel, e incluso aquellos que reciben remesas de sus familiares en el extranjero enfrentan una difícil situación cuando enferman y tienen que valerse por ellos mismos, el escenario es mucho peor para quienes no tuvieron hijos o no cuentan con familia en el exterior y les toca subsistir sin dólares en un país donde la inflación es desmesurada y aumenta por día.

Según un informe reciente de la firma DatoWorld, Cuba es actualmente el país más pobre de Latinoamérica, con un 72% del índice de pobreza extrema, lo que sin duda ha traído como resultado un aumento de la mendicidad en las calles. En los últimos meses se ha visto incluso a menores de edad durmiendo en la vía pública.

La semana pasada se hizo viral la foto de un niño durmiendo en un banco del parque del Paseo del Prado en La Habana, justo en frente del lujoso Hotel Grand Packard, al que sólo tienen acceso los turistas o los hijos de los dirigentes en el país comunista.