Un cubano cansado del calor y la falta de opciones recreativas en la isla decidió convertir un charco de un huevo en la calle en un «Jacuzzi Privado»
«Ya que no tengo amigo coronel tengo jacuzzi privado» escribió el cubano en sus redes sociales.
El joven se quedó en el charco mientras se tomaba un «planchado» en Buena Vista.
Los huecos en las calles de La Habana y del todo el país son un problema constante, algunos han hasta sembrado matas en algunos de ellos.
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