Recientemente, un abogado cubano nombrado Miguel Viera expuso la enorme angustia que ha experimentado desde que comenzó a deshacerse de sus pertenencias a fin de conseguir dinero para abandonar la isla, una decisión que divulgó hace poco tiempo y que al decir de él responde a su propósito de brindarle a su hija un futuro mejor.
Este hombre, que ha adquirido gran popularidad en las redes sociales por emitir fuertes críticas contra el régimen cubano, confesó que optó por la emigración porque siente que es una necesidad, recalcando ello no le proporciona felicidad alguna.
En una publicación realizada en su perfil de Facebook, Viera manifestó: «Cuando viene alguien a ver la casa es mi esposa quien se encarga de todo, ella es quien está encargada de vender toda mi vida. En ese momento me voy al garaje y me encierro dentro del carro, allí encerrado y oscuro espero que pase el tiempo. No tengo el valor de negociar mi vida. De vender las cosas por las que tanto he luchado».
El letrado reveló que para él salir de Cuba implica renunciar a una parte de su esencia, perder esa conexión tan especial que lo ata a su tierra natal y que ha determinado su regreso a la misma cada vez que ha tenido la oportunidad de viajar al extranjero. También destacó que a pesar de las adversidades mantiene intacto su orgullo de ser cubano.
Asimismo, responsabilizó a la cúpula gobernante de la crisis migratoria existente, alegando: «De Cuba nos obligan a salir los que se han adueñado de ella. Los que imponen su doctrina y su política sin derechos. Nos obligan a ser desterrados, a extrañar el sol, a soñar con las playas desde lejos, a añorar nuestra infancia, a llorar a nuestras familias».
Por último, enfatizó: «Tendríamos que tomar consciencia todos de una vez de que ¡eso no es lo que queremos! De que Cuba no es de nadie y de que ¡tenemos derecho a no vivir lejos de ella! Tendré que irme por el egoísmo de unos pocos y por la cobardía de muchos, ahí me incluyo… me iré, pero ese día un poco, un poco no, bastante, ¡moriré por dentro!».
El pasado mes de septiembre, el antillano, quien se identifica en sus redes sociales como «Manuel Viera Porelcambio», dio a conocer que determinó marcharse de Cuba por su profunda insatisfacción con el panorama político imperante.
En aquella ocasión señaló: «No me voy de Cuba por problemas económicos, me voy por problemas políticos», agregando que la sociedad cubana «está rota» y que «nadie la quiere arreglar».
También anunció que había puesto en venta su vivienda, la cual está ubicada en el municipio capitalino de Playa, un inmueble al cual dedicó esfuerzos y recursos durante 18 años, erigido «piedra a piedra» y «donde vi nacer a mis tres hijos, pensada para vivir y tener allí el negocio».
Además, contó que igualmente pretendía vender su automóvil, un antiguo Dodge argentino que obtuvo tras efectuarse el correspondiente reparto de los bienes dejados por su padre al momento de su fallecimiento y que ha usado por más de treinta años. Al respecto dijo: » «Conozco cada tuerca y cada tornillo de mi palmiche».
En el 2021 Viera afirmó que Cuba jamás lograría avanzar en el ámbito económico en tanto permanecieran en el poder individuos que se oponen abiertamente a la existencia de una diversidad de ideas políticas enfocada en la igualdad de derechos. Ahora el jurista asegura que no volverá a su patria mientras «huela a miedo» y continúe vigente la férrea dominación política sobre la sociedad.
