Un balsero cubano identificado como Alexander contó su experiencia a BBC, luego de sobrevivir a dos naufragios en su intento desesperado de llegar EEUU. Según el habanero, él y otros 20, entre ellos dos adolescentes y cuatro niños menores de siete años, salieron a bordo de un pesquero pequeño, en la madrugada del 16 de noviembre de 2022.
El migrante reveló que pese a que en el pesquero cabían ocho personas, e iban 20, el mismo se movía rápido, pero empezó a llenarse de agua repentinamente cuando arreció el viento en Alta Mar.
«Fue cuestión de segundos. Un giro equivocado del timón, con una ola que venía de la parte delantera. Pasó por encima de la proa del barco y lo hundió al instante», confesó el isleño, uno de los dos únicos sobrevivientes de la travesía.
«A la velocidad que iba, cayó como un torpedo. No hubo tiempo para nada», detalló.
El hombre que estaba sentado en la popa de la pequeña embarcación, logró saltar justo antes de que se hundiera, y vio al pesquero desaparecer en la oscuridad del océano.
Los adultos pudieron salir a la superficie, pero tristemente los menores más pequeños, que iban a bordo de la cabina del bote no pudieron lograrlo.
Otro migrante colocó a un niño sobre sus hombros, para que el pequeño pudiese flotar, pero no por mucho tiempo. Alexander explica que «es imposible mantenerse a flote con una persona encima de ti».
El cubano tenía una brújula y trató de alentar a los adultos, todos los cuales intentaban mantenerse a flote en el Mar Caribe, a nadar en dirección hacia tierra firme.
Pero lastimosamente quienes perdieron a sus hijos no quisieron abandonar el lugar donde el pesquero naufragó, algunos nadaron pero otros se quedaron en la zona del naufragio, intentando encontrar a sus seres queridos.
Cuando cayó la noche nuevamente, el sobreviviente perdió de vista al resto de los balseros, optó por dejarse llevar por la corriente y dejar de nadar.
Tras dos días y dos noches a la deriva, justo cuando sus esperanzas se agotaban del todo, fue rescatado por otros cubanos a bordo de una embarcación.
No obstante, este otro barco de migrantes también estaba sobrecargado, y se hundió horas después, lo que lo salvó en esta ocasión fue mantenerse a flote sobre una caja de plástico.
«Las olas eran (altas como) montañas», indicó sobre esta segunda terrible experiencia en el mar.
Luego llegaron las alucinaciones, soltó la caja y por poco se ahoga, no mucho tiempo después tuvo la suerte de que un barco mercante lo viera y se comunicara con la Guardia Costera de EEUU.
Los guardacostas norteamericanos lograron rescatar con vida a Alexander y a otros ocho sobrevivientes del segundo naufragio.
El hombre de treinta y pico de años, durante varios días estuvo sin poder andar ni probar bocado, tras una experiencia devastadora.
BBC asegura que 2022 fue un año mortal para los migrantes, registrándose la segunda cifra más elevada de inmigrantes muertos en el orbe, y la más alta en América Latina y el Caribe desde que comenzaron los registros en 2014.
Según estadísticas oficiales del Proyecto de Migrantes Desaparecidos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), alrededor de 1.400 personas perdieron la vida intentando migrar en la región.
Estos números responden a estimados, probablemente la cifra de migrantes fallecidos sea mucho mayor de lo que sugieren los registros.
La agencia de prensa ha indicado que la principal causa de muerte de los migrantes el pasado año fue el ahogamiento, y la mayoría de las víctimas fatales fueron cubanos, mexicanos y venezolanos.
En lo que va de año la situación no parece presentar mejoría, ya que al menos 2.000 migrantes habían muerto intentando huir de sus países de origen hasta el pasado 14 de junio.