Según recoge el diario La Prensa, los 76 cubanos que se encuentran varados en el albergue de Chiquirí en Panamá aseguran estar «desesperados» porque no conocen la fecha en la que serán deportados a su país de origen.
«Los que nos quedamos en el albergue es porque no tenemos nada de nada y no existe otra opción que aceptar lo que nos dijeron las autoridades de Panamá», expresó un migrante que prefirió el anonimato.
El trato, que fue aceptado por estos 76 cubanos y rechazado por otros 56, les daba la posibilidad de regresar a la isla con 1650 dólares y la oportunidad de recibir un visado en la embajada de Panamá en Cuba.
Sobre el paradero de quienes decidieron no aceptar el trato, las autoridades informaron que se encuentran en un status migratorio ilegal y, de ser encontrados, serían detenidos y deportados a Cuba.
En lo que va del presenta año, las autoridades panameñas han deportado a casi cien cubanos a la isla como parte de un acuerdo que pretende garantizar el flujo migratorio de manera «regular, ordenada y segura», asegura Diario de Cuba.