En otra ley en Cuba que promete traer polémica y conflicto entre los cubanos, el gobierno de Cuba ha sacado un decreto oficial que obliga a los trabajadores del sector privado y los arrendatarios que se encuentren en el centro histórico de La Habana a aportar en concepto de impuestos una parte de sus ingresos para la conservación de esa área. El porciento que deberá ser pagado será fijado en las próximas semanas por el Ministerio de Finanzas y Precios. Los Cuentapropistas o emprendedores cubanos necesitarían además un permiso de la oficina del historiador de la ciudad que dirige Eusebio Leal.
De esta manera Eusebio Leal alcanza una cierta autonomía sobre el casco histórico de la Habana y sobre su mantenimiento. No tiene nada de malo que los emprendedores y trabajadores privados aporten a tener una ciudad mejor, pero no debe cargarse sobre ellos todo este peso y los valores impositivos deben estar acorde a la realidad de estos negocios, si ahogan en impuestos a estos comerciantes dejaran de existir por lo tanto nunca se desarrollara la economía privada. En otro aspecto si a estas empresas se les va a llevar una política impositiva al estilo de países capitalistas pues lo más justo es que se les permita llevar una economía de libre mercado para que puedan desarrollar todo su potencial.