Una demanda presentada en Cuba por el abogado independiente Julio Ferrer Tamayo contra el canciller cubano Bruno Rodríguez fue desestimada por el Tribunal Provincial de La Habana según reportó Martí Noticias.
Ferrer había presentado querella contra Rodríguez Parrilla por «perjuicio y daño moral», acusaciones vertidas por la legación diplomática cubana –bajo firma del Ministro de Exteriores de Cuba- en diciembre de 2016 ante la Oficina del Alto Comisionado de los Derechos Humanos de la ONU.
El gobierno de Cuba envió una comunicación a la ONU en la que aseguraba que el abogado independiente se negaba a presentarse a cumplir la sanción impuesta de cinco años por una supuesta “estafa y falsificación”, pero Ferrer calificó de “falsa” la información llevada al máximo organismo internacional.
En una entrevista concedida a Martí Noticias al momento de presentar el recurso, Ferrer explicó: “La misión permanente de Cuba en Ginebra presentó la nota 855 del 2016 a la Oficina del Alto Comisionado diciendo que yo y el resto de los miembros de Cubalex no clasificábamos como defensores de los derechos humanos, que éramos vulgares delincuentes», comentó el abogado.
Una traba burocrática, un tecnicismo impide a Ferrer escalar hacia la aceptación de la demanda, pero pone en entredicho al tribunal, y es que el jefe inmediato superior de Parrilla como Ministro de Relaciones Exteriores debe pronunciarse. Ese “superior”, no es otro que el General de Ejército Raúl Castro Ruz.