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En el contexto actual, hallar un sitio económico para vivir es uno de los mayores retos que enfrentan numerosas familias, pues ello repercute directamente en su ámbito financiero, de ahí que las decisiones en tal sentido deben ser adoptadas con mucha cautela. El incremento del precio de los alquileres de inmuebles en los últimos años supone una búsqueda exhaustiva por parte de las personas de una opción que se corresponda con su presupuesto. Generalmente, la regla más conocida para determinar cuánto dinero debe destinar una persona a la renta de una vivienda en función de sus ingresos es la de «40x». A pesar de que dicha regla no es aplicada con carácter universal al menos ofrece una noción del gasto que por este concepto se puede permitir una persona teniendo en cuenta el salario percibido.
La regla del alquiler «40x» implica que el sueldo anual de un individuo debe ser como mínimo 40 veces el precio mensual de su alquiler. Para comprender a cabalidad dicha norma es preciso acudir a un ejemplo numérico, es decir, si una determinada persona posee un ingreso anual de 50,000 dólares, sin deducir los impuestos, el costo de su alquiler mensual no debe superar los 1,250 dólares, cifra que es el resultado de dividir el total mencionado entre 40. La teoría en cuestión establece que, si el gasto en vivienda es mayor de 1/40 de los ingresos obtenidos, el sujeto estará «agobiado por el alquiler» y presentará problemas para cubrir otras necesidades básicas, así como para ahorrar.
Al respecto Jeff Rose, fundador de Good Financial Cents, manifestó: «La regla de alquiler ’40x’ es práctica, porque mantiene su alquiler dentro de una porción razonable de sus ingresos».
Asimismo, agregó: «Al asegurarse de que su salario anual sea al menos 40 veces su alquiler mensual, es probable que mantenga su alquiler alrededor del 30% de sus ingresos brutos. Este es un punto óptimo que los expertos sugieren para los costos de vivienda, ya que permite suficiente espacio en su presupuesto para otros gastos, como alimentos, transporte y ahorros. Apegarse a esta regla te ayuda a mantener un presupuesto equilibrado sin estirar demasiado tus finanzas».
Erika Kullberg, especialista en finanzas personales y fundadora de Erika.com, por su parte, señaló: «Si gastas demasiado en el alquiler, que es un gasto mensual fijo, puede dificultar el pago de otros gastos esenciales de la vida, como los servicios públicos, los comestibles, la gasolina y el seguro».
Igualmente, explicó: «Es natural querer encontrar un lugar tan agradable para vivir como puedas pagar, pero no podrás disfrutar de relajarte en tu casa si accidentalmente gastas demasiado en alquiler y no puedes cubrir tus otros gastos. Ejercer demasiada presión sobre su presupuesto puede llevar a asumir deudas de tarjetas de crédito con intereses altos, lo que puede ponerlo en una situación financiera realmente difícil».
En lugares donde el costo de vida es elevado, las probabilidades para encontrar un alquiler cuyo precio se ajuste a la regla «40x» son menores. Por el contrario, en zonas más asequibles el presupuesto de alquiler en virtud de esta teoría puede propiciar a la persona residir en un lugar con más condiciones de las que estrictamente requiere. No obstante, amén de las circunstancias, lo cierto es que la regla «40x» es un método simple que cualquiera puede emplear como punto de partida para lograr un equilibrio financiero.
Si bien dicha regla se erige como una herramienta útil, la realidad es más rica y su aplicación no es absoluta, sino que depende del escenario financiero de cada individuo evaluado integralmente, por lo que en ocasiones puede resultar atinado pagar más o menos del límite del presupuesto de alquiler fijado con el uso de la misma.
Por ejemplo, los residentes de ciudades sumamente caras como Nueva York o San Francisco quizás necesiten dedicar un 50% o más al alquiler con el objetivo de vivir en zonas más céntricas o con mejores posibilidades de empleo. En tal caso, se verán obligados a restringir su presupuesto en relación a otras partidas.
Sin embargo, si una persona está inmersa en una situación de endeudamiento por solicitar préstamos para cursar estudios, para adquirir un automóvil o para sufragar el importe de facturas médicas, es lógico y conveniente que decida pagar una suma de alquiler inferior a la estipulada por la regla «40x», ya que su prioridad es dejar atrás ese complejo panorama financiero y para ello es preciso que cumpla con sus obligaciones crediticias.
Además, puede ocurrir que la persona esté atravesando un período de inestabilidad financiera con ingresos irregulares, en cuyo caso sería pertinente ajustar el costo del alquiler de manera que este sea 30 veces menor que el salario recibido o hasta 40 veces más bajo si en la región en la que vive los gastos añadidos como impuestos, seguros o servicios públicos son elevados.
El uso de la regla «40x» no debe conllevar a las personas a desistir de la alternativa de vivir solos. En verdad, lo fundamental es analizar objetivamente el estado financiero que se ostenta y determinar qué monto de alquiler constituye el más viable. Ahora bien, lo óptimo sería que el precio mensual del alquiler de la vivienda sea 40 veces inferior al salario anual o al menos que se halle cerca de ese límite.
A continuación, se expone la cantidad de dinero que una persona debe destinar al alquiler de vivienda en función de su salario anual:
