En recuperación dos estadounidenses, luego de que las atacara un tiburón en sus vacaciones en Las Bahamas, reportó 7NewsMiami.
Según dio a conocer la Real Fuerza de Policía de Las Bahamas, las dos mujeres fueron atacadas el pasado 7 de febrero sobre las 6:30 pm en las aguas de Bimini Bay, donde las autoridades investigan lo sucedido.
Las víctimas, Rileigh Decker de 20 años y Summer Layman de 24, dijeron a la prensa que agradecen sus heridas no fueron peores.
Desde una cama de hospital en Melbourne, Florida, Decker reveló que el ataque prácticamente destruyó su pierna.
«Me seccionó el tendón de Aquiles. Mi arteria está cortada, mi nervio está cortado», confesó.
Decker y Layman viajan anualmente a Bimini, un destino vacacional muy visitado al oeste de Bahamas, popular para quienes gustan disfrutar de actividades como la pesca, y nadar en playas prístinas.
El día del ataque estaban cantando y bailando sobre un bote con amigos, cuando se les ocurrió la idea de saltar al agua.
«No es algo que no hayamos hecho antes», cuenta Layman, quien comenzó su amistad con Rileigh justamente en un bote en Florida.
Ellas detallaron que miraron hacia abajo y nunca vieron señales de tiburones al saltar, sin embargo al caer en el agua Decker sintió un empujón en su pierna.
«Inmediatamente supe que me acababa de morder un tiburón», explicó Decker.
Afortunadamente, su amigo Austin las ayudó a salir rápidamente del agua, de acuerdo al testimonio de las víctimas quizás no se hubiesen salvado si el joven no hubiese actuado con inmediatez.
Una de ellas precisó que el tiburón mordió y luego soltó, en lugar de morder y llevarse su pantorrilla con él.
En espera de primeros auxilios, improvisaron un torniquete con una cuerda que estaba en un bote próximo para colocarlo en la pierna de Decker.
«Escuché sus gritos, así que entré en modo de pánico por ella; naturalmente, ese fue mi instinto. Miré hacia abajo y mi pie estaba completamente destrozado. Ni siquiera me di cuenta de que me habían mordido. Solo estaba en modo de lucha o huida», narra Layman.
Las dos estadounidenses fueron trasladadas a una clínica de la isla en un carrito de golf, allí recibieron tratamiento. No obstante, Decker, cuya lesión era más grave, tuvo que ser trasladada en avión a Nassau para cuidados especializados. Luego ambas regresaron a Florida para ser atendidas en un hospital.
Tanto Decker como Layman revelaron soportaron parte del trayecto sin ningún analgésico. Summer con lesiones menos graves recibió 48 puntos de sutura y ya fue dada de alta, sin embargo queda a la espera de un posible injerto de piel.
Por su parte, su amiga Decker ha tenido que someterse a dos cirugías y ahora está siendo atendida en un hospital en Orlando, donde se espera vuelvan a intervenir quirúrgicamente con el objetivo de reparar el nervio y la arteria de su pierna.
Decker, la más afectada, ha llegado a confesar que está muy agradecida de seguir con vida, y de todavía contar con su pierna, pese a las múltiples operaciones.
«Tenemos nuestras extremidades y estamos aquí para contar la historia, así que estamos realmente agradecidas. Las probabilidades son muy bajas, sin embargo, nos ocurrió a nosotras», declaró Layman.
Aunque los ataques de tiburón en Bahamas no son comunes, tampoco son inexistentes. Según el Archivo Internacional de Ataques de Tiburones del Museo de Florida, ha habido 34 ataques no provocados en las Bahamas desde 1580. En perspectiva, Las Bahamas ocupan el noveno lugar en ataques de tiburón a nivel mundial.
Las probabilidades de un ataque dependen de varios factores, como la actividad en el agua, la presencia de peces, y la época del año. Sin embargo, en términos generales, los ataques de tiburón siguen siendo incidentes inusuales en la región.