EE.UU. desestima vínculo con presuntos ataques a Cuba

El Departamento de Estado de los Estados Unidos negó esta semana tener alguna implicación sobre supuestos ataques violentos contra Cuba.

Esta comunicación se realiza como contestación a las infundadas denuncias realizadas por el gobierno cubano de que en el país se planeaban acciones desestabilizadoras con apoyo desde los EE.UU.

Un funcionario del Departamento de Estados explicó a Reuters mediante un correo que: «Las acusaciones de que Estados Unidos está alentando acciones violentas contra el gobierno cubano son absurdas».

Este funcionario calificó estas acusaciones como un impulso por desdeñar y desestimar la capacidad de los emigrantes en el exilio para exigir la libertad del pueblo cubano, en tal sentido explicó: «Estas acusaciones más recientes son la última iteración de los esfuerzos de las autoridades cubanas para menospreciar a los emigrantes que ejercen su libertad de expresión, incluida la crítica del pésimo historial de derechos humanos de Cuba y la implacable represión».

Sin embargo, la dictadura cubana no posee ningún elemento probatorio que corrobore la complicidad del gobierno estadounidense con esos supuestos planes terroristas. No obstante, días atrás el Ministerio del Interior (MININT) publicó la Resolución No. 83 del 7 de diciembre de 2023 en Gaceta Oficial de la República de Cuba una lista de al menos 80 personas y organizaciones extranjeras vinculadas aparentemente a la planificación, financiamiento y promoción de actividades terroristas contra el país caribeño.

A pesar de que la actual administración estadounidense haya flexibilizado alguna de las medidas del antiguo presidente Donald Trump, en cuanto al envío de remesas y otras, las relaciones bilaterales entre ambos países no fluyen bien. Hace solo días el gobierno estadounidense confirmó la presencia de Cuba, Irán Corea del Norte y Siria en la lista de países patrocinadores del terrorismo, tal y como lo hace todos los años.

Estos países que integran la lista son objetivos de severas sanciones, en las que se incluye el control de sus exportaciones, mayores requisitos para los visados, la prohibición de armas con ese país y duras sanciones económicas. También contempla restricciones en la ayuda exterior que, en lo relativo a créditos y préstamos, afectan al régimen de La Habana.

En 2021, el Departamento de Estado determinó que Cuba había prestado apoyo en repetidas ocasiones a actos de terrorismo internacional en los seis años transcurridos desde que se había rescindido su designación. Citando protocolos de negociación de paz, Cuba rechazó la petición de Colombia de extraditar a 10 líderes del Ejército de Liberación Nacional (ELN) que vivían en La Habana después de que ese grupo se atribuyera la responsabilidad del atentado de 2019 contra una academia de policía de Bogotá en el que murieron 22 personas y otras 87 resultaron heridas.

Washington posee pruebas suficientes de que La Habana si mantiene vínculos con terroristas y los acoge en su país, incluso ciudadanos que han sido acusados fuera de Cuba por maltratar y golpear a personas por pensar de forma disidente. Estas personas nunca se les ha hecho un juicio y el gobierno cubano lo sabe.