El Ministro de Cultura, Alpidio Alonso, fue uno de los funcionarios que golpeó a jóvenes pacíficos que protestaban frente al ministerio.
Las imágenes del Ministro de Cultura arrebatando el teléfono y golpeando a los jóvenes se han vuelto virales como ejemplo de la intolerancia de la dictadura cubana.
Los jóvenes como la vez anterior solo pedían diálogo y expresar de forma pacífica su desacuerdo y recibieron como respuesta golpes y arrestos.
El mismo Alpidio fue en el que en la protesta anterior violó todos los acuerdos que los jóvenes ingenuamente firmaron el Ministerio de Cultura.