El empresario inmobiliario cubanoamericano, Jorge Pérez acusó al condado de Miami-Dade de reducir los fondos para el museo que lleva su nombre.
Pérez dijo que lo considera un “castigo” por haber acogido una muestra de arte contemporáneo, dio a conocer The Art Newspaper.
Los comisionados del condado, a fines de septiembre votaron para eliminar 550 mil dólares de la subvención de cuatro millones que había acordado con Pérez Art Museum Miami (PAMM) para el año fiscal 2017.
De acuerdo a The Art Newspaper, el dinero se habría otorgado al American Museum of the Cuban Diaspora.
El magnate dijo al medio especializado que “podrían haber tomado el dinero de otros museos en igualdad de condiciones, sólo lo tomaron de PAMM. Este fue definitivamente un movimiento orquestado y fue un castigo por nuestro proyecto”.
Según el multimillonario cubanoamericano, el punto de discusión es que la exhibición actual del arte cubano contemporáneo de su institución, titulada “En el horizonte” y extraída de una colección del propio Pérez, incluye obras de artistas que todavía residen en Cuba; la muestra también ha estado acompañada por eventos que incluyen a estos artistas.
Elizabet Cerviño, artista que vive en La Habana, tiene un performance diario durante esta semana en el Pérez Art Museum. El museo de la diáspora sin embargo, está concebido para exposiciones de los artistas que han abandonado la Isla comunista, de manera exclusiva.
“La disputa expone una grieta histórica y profundamente arraigada en la comunidad cubanoamericana de Miami entre quienes apoyan el embargo comercial de los EEUU contra el régimen de los Castro y quienes se oponen a él”, de acuerdo al medio.
Jorge Pérez, quien formó parte de una delegación que acompañó al exmandatario estadounidense Barack Obama en su visita a Cuba en 2016; considera que, “la continuación del embargo y la retórica de Cuba y EEUU, unos contra otros, no ha resultado en nada más que en el sufrimiento del pueblo cubano”.
Desde su punto de vista, que el presidente estadounidense Donald Trump “haya revertido la política hacia el régimen de la Isla sólo ha incrementado el problema”.
Para el magnate de origen cubano, “el presidente (Donald) Trump le está dando crédito nuevamente a la parte radicalmente derechista de la comunidad cubana. Y los políticos están usando eso”.
Los detractores de la política de acercamiento inaugurada por el predecesor de Trump han dicho que las decisiones de Obama redundaron en “una toma de control de la programación cultural de Miami”.
Carisa Pérez Fuentes, vocera del American Museum of the Cuban Diaspora, alegó a fines de septiembre que: “Después de que Obama comenzó a normalizar las relaciones con (el Gobierno de) Cuba en 2014, el calendario cultural de Miami se llenó rápidamente de exposiciones, conciertos e intercambios culturales (de figuras cubanas) con nuestros museos y, lo que es más importante, nuestros impuestos están siendo utilizados para presentar la agenda cultural y política de (el Gobierno de) Cuba a los EEUU”.
En testimonio a los comisionados, Franklin Sirmans, quien está al frente del Pérez Art Museum Miami indicó, “no hay un centavo que PAMM haya gastado en un artista que vive en Cuba”; sin embargo según fuentes, el museo ha comprado arte cubano con fondos donados por Pérez con este fin.
El cubanoamericano rechazó como “absurda” cualquier sugerencia de que él o PAMM, que lleva su nombre luego de que donara 35 millones de dólares en efectivo y obras de arte, en 2011, simpaticen con el régimen comunista.
“Cualquiera que me conozca sabe que critico totalmente el sistema de Castro y que mi familia perdió todo su dinero y fue desplazada por Castro. Pero aún debes estar orgulloso de la cultura que es tuya. Y de eso se trata esta exposición”, comentó el empresario.
Por otra parte, siete de los 13 comisionados del condado de Miami-Dade, todos de origen cubano, votaron para retirar dinero de PAMM y entregarlo al museo de la diáspora, da a conocer The Art Newspaper.
La comisionada Daniella Levine Cava, comenta que “los problemas de la diáspora cubana son muy delicados, especialmente para las personas cuyas familias sufrieron a manos del régimen de Castro, y eso sí afecta la votación”.
(Con información de Diario de Cuba)