El régimen cubano obtiene entre 20 mil y 56 mil dólares por la entrada de cada auto a Cuba desde EE.UU.

A la dictadura cubana le facilitaron una nueva fuente de ingresos al aprobarse por el gobierno estadounidense actual el envío de autos a la isla caribeña. Un beneficio para no muchos en la isla que tienen la posibilidad de comprar un auto e importarlo.

La compañía Maravana cargo lleva 3 años de creada, propiedad de un cubanoamericano establecido hace varios años en el país norteño. La misma cuenta con la licencia para enviar a la isla paquetes de comida, electrodomésticos y varias cargas. Se conoció por América Noticias que Maravana obtiene un promedio de 8.000 dólares por cada auto que envía a Cuba, cubriendo el pago de seguro, transporte y cualquier otro trámite requerido.

El sitio 14 y Medio en un informe aseveró que el régimen por cada auto obtiene una ganancia entre 20.000 y 56.000 dólares dependiendo del modelo del auto, el año de fabricación y otros aspectos que según Alejandro él desconoce. Explica el cubanoamericano que desconoce el método empleado por la aduana cubana para valorar el precio de cada auto importado a la isla. De igual manera detalla que esta entidad cubana no admite vehículos con menos de cinco años de antigüedad, menos los del año 2019.

El empresario reafirma la necesidad de que las personas acudan a empresas de prestigio en el mercado como la suya y evitar hacerlo por otras que carecen de los permisos eximentes de las medidas del embargo de Estados Unidos a la isla, previendo la imposición de multas o procesos penales. Destaca la actividad de su empresa como continua y en aras de desarrollo por el reconocimiento de sus clientes.

El Departamento de Estado de Estados Unidos en abril otorgó licencias a empresarios de Miami para el envío de autos, camiones, tractores e incluso trailers a trabajadores del sector privado en Cuba, la licencia especifica que el envío no puede realizarse a las agencias del régimen cubano. Varios autos de diferentes marcas y modelos circulan por las calles cubanas últimamente, los mismo se divisa un Tesla, un Mercedes Benz, Un Jeep o cualquier otro jamás imaginado en Cuba.

Obviamente son los dueños de MIPYMES o dueños de grandes negocios, hijos de dirigentes los agraciados que pueden tener este tipo de vehículos modernos. La masa trabajadora no tiene la posibilidad de con su salario de menos de 50 dólares poder reunir para por lo menos en 20 años comprarse un carro, ni así lo lograrían. Lo cierto es que el régimen si obtiene verdaderas y jugosas ganancias mediante esta vía. Cada vez son más dueños que quieren importar su carro desde el exterior teniendo en cuenta que en la isla no hay un mercado atractivo en este sentido y los vehículos a la venta son de muchos años atrás y modelos que casi ni se usan en el mundo.