Desde hace aproximadamente dos aƱos, hay una nueva moda en Cuba, las quinceaƱeras buscan fotografiarse en los cementerios, algo que a algunos les parece muy extraƱo, puesto que no existen referentes similares ni en la cultura cubana, ni en otras. Una madre cubana contĆ³ a CubaNet que cuando su hija le expresĆ³ su deseo cercana a cumplir los quince aƱos, al enterarse casi se desmaya.
Daysi primero pensĆ³ en llevarla al psicĆ³logo, pero la joven le contĆ³ que otras amigas de la escuela han hecho lo mismo, por la simple razĆ³n de que en la Isla estĆ” de Ā«modaĀ».
Ā«No se ve todos los dĆas pero ya me lo han pedido bastante, incluso las madres me dicen Ā“falta la foto del cementerioĀ“ (ā¦), al principio me era chocante, un chiste pero nada de eso, es la moda, rara, pero es lo que se usaĀ», explicĆ³ un fotĆ³grafo.
Ā«He tenido casos de parejas que me piden que les tome fotos en la tumba de algĆŗn familiar o poniĆ©ndole flores a La Milagrosa, pero eso se puede decir que es casi normal, lo novedoso son las fotos de quince en el cementerio, y no en el ColĆ³n, que tiene lugares con alguna visualidad mĆ”s o menos interesante, sino en tumbas abandonadas (ā¦), en el Cementerio del Calvario, en el de Calabazar, que son lugares tĆ©tricos, como para una pelĆcula de horrorĀ», detallĆ³ Leandro, un profesional especializado en Ć”lbumes para bodas y quince.
Karen, diseƱadora y una de las gestoras de un estudio fotogrĆ”fico para quinceaƱeras, alega que existe Ā«una relaciĆ³n evidente entre la estĆ©tica de los llamados Emos, surgida a mediados de los aƱos 80, y estas nuevas modas en las celebraciones de quince entre las hembrasĀ».
Ā«Aunque se comienza a usar los Ć”lbumes de fotos entre los varones, hasta el momento no he visto algo parecido (ā¦), sĆ sĆ© que algunas revistas de moda, de finales de los 80 y principios de los 90, inspiradas en la mĆŗsica Emo, trabajaron con algunos elementos y hasta se apropiaron de la estĆ©tica como tal (ā¦), recuerdo haber visto algĆŗn que otro ensayo fotogrĆ”fico en revistas de este corte con el tema de los cementerios, los ambientes sombrĆos (ā¦). En el mundo hay todo un fenĆ³meno a partir de la filmografĆa de vampiros y seres de ultratumba, y son los jĆ³venes quienes forman grupos de fans y asumen esas personalidades (ā¦), en Cuba tienes el ejemplo de la calle G, en el Vedado, donde todavĆa se reĆŗnen vampiros, hombres lobos y otras tribus urbanas, algo que era imposible imaginar hace veinte aƱos atrĆ”s (ā¦), sin dudas esto ha pasado a las celebraciones de quince, no solo con lo de los cementerios sino con otras estĆ©ticas nada tradicionales, donde se recrea no el ambiente de la mansiĆ³n seƱorial y la niƱa inocente con la carita de Ć”ngel sino lo estridente, lo raro, lo grotesco como formas de comunicar estados de Ć”nimo, incluso como rebeliĆ³n frente a padres e incluso frente a otras presiones mĆ”s allĆ” de la familia, la escuela, el barrio, el paĆs, el mundo donde vivenĀ», comenta la mujer estudiosa del tema.
Adolescentes entrevistadas contaron que sus fotografĆas en el cementerio, no tienen nada que ver con pertenecer a un grupo o culto, tampoco con cierta rebeldĆa, sino con Ā«seguir la corrienteĀ».
Ā«Mis padres no quieren, dicen que eso me va a traer problemas, que si no sĆ© quĆ© chiquita lo hizo y se muriĆ³, pero yo lo voy a hacer (ā¦), los vestidos con vuelos y encajes, los abanicos y todas esas cosas raras no van conmigo, yo no soy asĆ (ā¦), yo quiero que la gente vea quiĆ©n soy de verdad, cĆ³mo me siento, para mĆ la muerte no es nada malo, al contrario (ā¦), me gustan los cementerios, yo creo que existe algo mĆ”s allĆ” de la vida y me siento conectada con ese otro mundo, mĆ”s espiritual (ā¦), no sĆ© si haga un Ć”lbum pero mis amigos y yo las subiremos a Facebook y haremos un video de noche (ā¦), no quiero que sea como lo de todo el mundoĀ», considera Laila, una niƱa de 14 aƱos, que valora hacer su sesiĆ³n de fotos en el cementerio chino de La Habana.
(Con informaciĆ³n de CubaNet)