Uno de los mejores cerradores que tuvo la pelota cubana, y ahora polémico director del equipo de béisbol cubano Industriales, Víctor Mesa de 58 años de edad, dijo que en la MLB sería millonario.
El ex jardinero central regresó a Cuba el 25 de febrero, luego de una visita a Estados Unidos, en la que estuvo acompañado por su hijo, el joven Víctor Víctor Mesa; donde además se encontró con Orlando “El Duque” Hernández en la ciudad de Miami a quien no veía hacía más de 20 años.
Tras arribar a la Isla, el mánager de “los azules” accedió a tomarse fotos con fanáticos y responder sus preguntas en la Terminal 2 del Aeropuerto José Martí de La Habana.
Mesa dijo que fue bien recibido en Estados Unidos, pero no se quedó callado continuó contando: “recibí muchos elogios de parte de íconos del béisbol de las ‘grandes’, quienes me ven desde otra óptica”.
“Ellos ven que del equipo de Las Villas hice un equipo grande, que luego a Matanzas lo saque del sótano y lo puse donde nunca llegarían (…) y ahora con Industriales, que hacía diez años que no podía encender una vela, lo hice brillar y el Latino que igualmente no llenaba una grada y en esta serie cerró por capacidad…”, detalló.
“Con todo esto que he logrado aquí en Cuba, en las Grandes (Ligas) yo sería multimillonario”, confesó tras una pausa y bajando el tono mientras accedía a las fotos.
“Mi problema es yo no domino el inglés”, añadió. “Eso hace unos años fue un grandísimo problema para nosotros (…) a muchos grandes peloteros los sancionaron sólo porque fueron descubiertos aprendiendo inglés”, comentó el mentor de los Industriales, que además ha estado al frente de equipos como Villa Clara y Matanzas.
Conocido como La explosión naranja, Víctor Mesa es una de las glorias del deporte cubano, considerado uno de los peloteros más completos, luego de retirarse se ha dedicado a dirigir equipos de diferentes provincias del país, su comportamiento explosivo y a veces inapropiado en el terreno le ha hecho generar controversia, e incluso la prensa oficialista lo ha criticado en más de una ocasión.
En Miami dijo a El Nuevo Herald que estaba en EEUU de vacaciones, “hicieron el equipo Cuba y como no estoy al frente, sin rencillas quise coger unas vacaciones aquí en Estados Unidos”.
“Vinimos a descansar a bañarnos en la playa, a ver jugar a los Marlins, y a distraerme, era necesario para mi distraerme”, agregó.
Y aunque se declaró patriota, explicando las razones de por qué no ha abandonado Cuba, y no probó suerte fuera, dijo que si algún día tiene que dirigir un equipo donde sea, lo dirige.
A una pregunta del reportero del diario miamense Mesa respondió que sería una gran felicidad dirigir los Marlins, “me gustaría”, concluyó.
(Con información de Cubanet y El Nuevo Herald)